Poco ha podido hacer Carlos Sainz ante un Charles Leclerc intratable durante todo el fin de semana. Hasta 3 décimas de diferencia han sido las que han separado a ambos pilotos, uno con unas sensaciones brutales y máximo favorito para la pole, como finalmente ha sido, y el otro reportando problemas tras pasar por su peor viernes desde que está en la Fórmula 1.
A pesar de todo, buenas sensaciones
Los Ferrari han demostrado ser el equipo más rápido en esta pista de Montecarlo, como suele ser habitual. Ya pasó en 2021, donde el equipo italiano, a pesar de no tener un coche competitivo, fue el coche más rápido en clasificación. Sin embargo, esta vez es diferente, las sensaciones con el SF-24 son más que buenas, y Charles Leclerc tiene una oportunidad de oro para redimirse.
Es por ello que el equipo y el propio Carlos Sainz, y han dejado claro cuál es el objetivo para la carrera del domingo, defender esa primera posición como sea, ante una McLaren competitiva, y un Max Verstappen más lejos de lo habitual, se presenta un escenario perfecto para que Ferrari vuelva a ganar.
“Estoy feliz de ver a Charles en la pole y al equipo con posibilidades de ganar mañana. Haremos todo lo posible y ayudaremos a Charles consiga a ganar. Condujo increíblemente todo el fin de semana”, decía Carlos Sainz.
“Me faltaba un poco de confianza. Si en otro lado lo pagas con media décima, aquí te cuesta 2-3 décimas. Es algo que tendremos que analizar”, prosiguió.
“Pero salvamos el fin de semana con dos buenas vueltas en la Q3. Todo el fin de semana fue algo complicado para mí, no tenía la confianza habitual que tengo en Mónaco”, concluyó Carlos Sainz.
Es así como el piloto de Ferrari ha querido dejar claro cuál es el objetivo del equipo para la carrera, además de lograr un podio con el español, mantener a toda costa esa pole conseguida por el monegasco.
