Los Angeles Angels han hecho oficial la dura lesión de su jardinero central, Mike Trout, que sufrió una rotura del menisco de su rodilla izquierda durante la victoria por 6-5 sobre los Philadelphia Phillies del pasado lunes 29 de abril. El equipo no ha informado el posible tiempo de baja del pelotero pero fuentes indican que podría ser una recuperación de entre cuatro a seis semanas, representando un nuevo capítulo en el martirio por las lesiones de Trout.
El jardinero era considerado uno de los mejores jugadores de la MLB hasta que su estado físico se convirtió en un problema hace tres temporadas. Después de la temporada afectada por el COVID-19, Trout sólo ha podido estar presente en 237 de 486 juegos por diferentes lesiones. Todo empezó en 2021 con un problema en la pantorrilla que lo dejó fuera de la temporada desde mayo, en 2022 fue un problema de espalda lo que le hizo perderse gran parte del verano y en 2023 fue una fractura en la mano izquierda lo que lo dejó fuera de circulación por casi la mitad del año.
“Es simplemente frustrante. Pero lo superaremos,” declaró Trout, visiblemente afectado por una nueva lesión en una temporada que pintaba como un resurgimiento para él con hasta 10 home runs y seis bases robadas en 29 juegos.
Sin duda una dura baja para el equipo, que se suma a la lesión del tercera base Anthony Rendon y de la marcha de Shohei Ohtani a los LA Dodgers hace unos meses. Ahora, tendrán que hacer uso de piezas como Mickey Moniak, de Luis Rengifo o de su nueva incorporación Kevin Pillar. No obstante, toda la franquicia sabe del enorme golpe de esta lesión, sobre todo para el propio Mike Trout.
“Nadie quiere jugar más que Mike. Él ama esto. Ama todo sobre esto. Él despierta pensando sobre esto, se va a la cama pensando sobre esto. Él come, duerme y respira béisbol. Lo siento mucho por él,” declaró el general manager de los Angels, Perry Minasian.
