No podía tener mejor motivación el Liverpool en su visita a Londres. Si los de Jürgen Klopp conseguían vencer al Tottenham, tras la derrota del Manchester City frente a los Wolves, asaltarían el liderato de la Premier League más de dos años después, ya que desde septiembre de 2021 no ocupaban el lugar más alto en la tabla de la clasificación.
Sin embargo, dos expulsiones, una en la primera mitad y otra en la segunda, fueron una lápida demasiado pesada y difícil de levantar para el Liverpool para conseguir la victoria en el feudo del Tottenham. Aún así, los de Jürgen Klopp firmaron un gran encuentro y arañaron un punto con nueve jugadores sobre el césped.
Una espectacular primera parte en la que hubo de todo
Escasos minutos bastaron para ver lo que estaba en juego en el Tottenham Hotspur Stadium. El Liverpool, que podía ponerse líder de la Premier League más de dos años después, salió con todo y pudo adelantarse en el marcador en varias ocasiones en los primeros minutos.
Cody Gakpo y Curtis Jones tuvieron las más claras en una doble ocasión, pero Vicario evitó el tanto de los visitantes con dos grandes paradas. Minutos más tarde, era Bissouma el que evitaba el tanto del Liverpool.
Cuando todo hacía apuntar a que el Liverpool anotaría el primer tanto del partido, Curtis Jones fue expulsado por una durísima entrada sobre Bissouma. Mucha suerte tuvo el centrocampista del Tottenham de poder seguir sobre el terreno de juego.
A pesar de la expulsión, el Liverpool siguió apretando y anotó el primero del partido, pero fue anulado por un justo fuera de juego. En la siguiente jugada, Son anotó el 1-0 gracias a un gran pase de Richarlison, precedido por un pase magistral de Maddison. El delantero brasileño pudo ampliar distancias poco después, pero su disparo se estrelló contra el poste.
El Liverpool, lejos de caer a la lona, dio la sorpresa y anotó el gol del empate en el tiempo de descuento por obra de Cody Gakpo. Antes del descanso, los de Jürgen Klopp pudieron incluso marcar el 1-2, pero Luis Díaz no consiguió convertir una magnífica asistencia de Salah. Una primera parte muy completa y en la que hubo de todo.
Otra expulsión y un gol en propia en el 95 condenaron al Liverpool
En la segunda mitad, el Tottenham salió con todo, dispuesto a reflejar su superioridad numérica en el marcador. Sin embargo, con lo que no contaban los locales era con el héroe del Liverpool: Alisson.
El guardameta del Liverpool realizó dos paradas soberbias en los primeros compases de la segunda mitad para evitar el 2-1. Con una espectacular mano derecha, Alisson evitó el golazo de Maddison. Con un palmeo soberbio poco después, el brasileño evitó el doblete de Son.
Cuando Alisson no pudo más, fue el colegiado el que evitó el tanto de la victoria del Tottenham. Tras una jugada calcada a la del primer gol, Son consiguió anotar el 2-1. Sin embargo, un claro fuera de juego invalidó el tanto.
Cuando parecía que el partido se calmaba y el Liverpool conseguiría amarrar el empate con un jugador menos sin sufrir, el árbitro volvió a expulsar a uno de los de rojo. Tras una dura entrada, Diogo Jota veía la segunda cartulina amarilla y dejaba a los de Jürgen Klopp con nueve jugadores sobre el césped.
En el minuto 95 y cuando todo apuntaba a un empate, Joel Matip se anotó un increíble gol en propia para darle los tres puntos al Tottenham. El Liverpool remó y remó para, finalmente, morir en la orilla. Los de Jürgen Klopp seguirán aumentando la racha de días sin ser líder de la Premier League.