El expelotero dominicano, David Ortiz, fue seleccionado al Salón de la Fama de Cooperstown en su primer año de elección.
El "Big Papi" se convirtió en el segundo dominicano y apenas el sexto latino enen alcanzar el Salón de la Fama de Cooperstown en su primera boleta.
Además, es apenas el quinto en la historia de los Red Sox en lograr su ingreso de la forma más temprana posible. A lo largo de 20 años de carrera, David Américo Ortiz Arias conectó 2,472 imparables, 541 cuadrangulares y empujó 1,768 carreras, además de dejar promedio vitalicio de .286 y ser recordado por sus excelsas actuaciones en postemporada.
Con 10 selecciones al juego de estrellas, un campeonato del derby de cuadrangulares, siete bates de plata, un MVP de serie mundial y uno de serie de campeonato y tres anillos de campeón, Ortiz marcó un precedente en Boston, convirtiéndose en uno de los mejores bateadores designados que haya aparecido vez alguna en un terreno de béisbol.
Jugó seis temporadas en Minnesota, llegando a Boston el 22 de enero de 2003 con un contrato de un año y $1,2 millones, por recomendación de uno de sus grandes amigos, Pedro Martínez. Después de ahí, tuvo una magnífica carrera de 14 años con el uniforme patirrojo.
"Big Papi" es un apodo que no cae del todo bien por los lados del archienemigo, pues contra los Yankees, Ortiz bateó para .307 de average con 53 con jonrones y 171 RBI en temporada regular; además de haber sido su gran verdugo en la postemporada de 2004, logrando dos dejadas en el terreno que muchos bostonianos agradecen hoy en día.
Tantos momentos memorables a lo largo de su carrera se resumen a lo logrado hoy, un lugar en el salón de los inmortales, donde está lo más exclusivo y la élite del mejor béisbol del mundo.
