Édgar Navarro tuvo que cambiar los guantes de box por la silla de ruedas. A los 27 años de edad sufrió un disparo en la espalda durante un asalto, esto le ocasionó cuadriplejía con escasa movilidad en los brazos y las manos.
Édgar había sido un destacado boxeador amateur; dos veces participó en Guantes de Oro."Esta nariz no es de corredor, es lo que me dejó el boxeo", contó a El Sol de Toluca.
Acostumbrado a la vida deportiva, buscó una nueva disciplina que pudiera practicar. Recordó al equipo paralímpico mexicano de Atlanta 96 y lo contactó. Al principio jugaba basquetbol porque podría practicarlo en su silla de ruedas convencional.
Después sus familiares cooperaron para que comprara una silla de atletismo. Seis años después del salto compitió en Atenas 2004 y ganó oro en los 200 metros y bronce en la maratón. En Beijing 2008 y Londres 2012 no compitió, pero sí lo hizo en Rio 2016 y ganó plata en 400 m y bronce en 100 m. Ahora competirá en Tokio 2020 a sus 50 años de edad.
"Haya o no haya medallas, es un privilegio estar en Tokio porque eso significa que logramos salir adelante", dijo a El Sol de Toluca.
