El Barcelona de Joan Laporta va dando forma a sus planes deportivos de futuro y una vez ejecutada la cláusula de renovación del canterano Alex Collado, que pasará a tener ficha del primer equipo, y trabajando en prolongar la permanencia de otros futbolistas del filial que acaban esta temporada como Jandro Orellana o Nico González, además de Óscar Mingueza que ya está fijo en la primera plantilla, se plantea como tarea urgente solucionar el futuro de Ousmane Dembélé, a quien le resta un año de contrato y a quien pretende, reveló a ESPN una fuente del club azulgrana, renovar a largo plazo.
La renovación del delantero francés, de 23 años, es un tema que ocupa en el Camp Nou desde hace meses pero que quedó aparcada durante la campaña electoral y que con la llegada de la nueva directiva ha regresado al escenario, entendiéndose vital tanto desde un plano deportivo como también financiero.
Los planes del Barça establecen presentarle una propuesta de tres temporadas ampliables a otras dos, adecuando, eso sí, su salario inicial a la difícil realidad económica del club. En el Camp Nou se confía que el jugador atendiera a ese esfuerzo aunque no se es ajeno a que, con la proximidad de la finalización del contrato, se puedan encontrar en una complicada negociación, por lo que en el caso de no llegar a un acuerdo en un plazo adecuado (antes del comienzo del próximo curso), no se descartaría ponerle en el mercado con el objetivo de evitar que pudiera marcharse gratis en 2022. Aunque este escenario, hoy por hoy, es el último que se contempla.
Disfrutando de su mejor momento desde que llegó al club en el verano de 2017 y habiendo dejado atrás, o eso parece, todos sus percances físicos y problemas de conducta que lastraron sus primeros años, el Barcelona considera trascendente una continuidad que avala personalmente Ronald Koeman. "Ousmane es un jugador importante. Su trayectoria está siendo muy buena y físicamente ha mejorado mucho.
“Creo que ha sido la clave de su regularidad. Si es por mí, claro que me gustaría que se quedase”, explicó el entrenador holandés el lunes, tras la victoria frente al Real Valladolid y descubriendo, sin disimulo, sus planes al respecto.
Dembélé no atendió en su momento la propuesta de la antigua directiva de Josep Maria Bartomeu en octubre, cuando el club azulgrana prorrogó de una tacada los contratos de Gerard Pique, Marc-André Ter Stegen, Clement Lenglet y Frenkie de Jong.
La situación ahora se observa distinta en el Barcelona, donde al margen de la renovación que se considera trascendental de Lionel Messi y a la espera de comenzar a tratar el futuro de Ilaix Moriba, que también acaba en 2022, quiere solucionar el futuro de un Dembélé que ha pasado de discutido, y señalado, a indiscutible.
