Normalmente, la duración de un vuelo de Madrid a Pamplona es de aproximadamente una hora. Por ello, el viaje del Real Madrid para enfrentar al Osasuna pintaba para ser uno ameno.
Lo que terminó por pasarle a ‘Los Blancos’ fue todo lo contrario. Primero, debido a las condiciones climatológicas adversas en ambas ciudades, LaLiga obligó al Madrid a viajar un día antes de su partido.
Ahí comenzaron las inconveniencias, ya que normalmente el equipo viaja el día del partido. Cuando el club ‘Merengue’ estaba por despegar del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, el vuelo tuvo que ser retrasado por nieve, con los jugadores aún en el avión.
La delegación blanca tuvo que esperar casi cuatro horas en la pista, para terminar despegando a las 11:00 p.m.
"Es inexplicable todo esto. Son ya demasiadas horas de tomadura de pelo", habrían dicho miembros del Madrid, según declaraciones publicadas por MARCA.
Tras las horas de retraso, el vuelo finalmente salió de Madrid y aterrizó en el aeropuerto de Pamplona, ya sin inconvenientes mayores por el clima.
Lo experimentado por el Real Madrid no fue totalmente ignorado por el Osasuna, que ha empleado un dispositivo para quitar la nieve del Estadio El Sadar.
El juego en sí promete ser un cotejo entretenido, ya que ‘Los Blancos’ necesitan tres puntos para ser primeros, y los ‘Rojillos’ necesitan ganar para salir de la zona del descenso.
