Al quarterback de los Packers de Green Bay Aaron Rodgers no le gusta que digan que la abultada derrota ante Tampa Bay es un indicio de que los rivales se han ajustado a los cambios a la ofensiva ha hecho el entrenador en jefe Matt LaFleur en su segunda temporada.

“Uno de cada cinco”, dijo Rodgers en respuesta al inicio de una sesión por Zoom con reporteros el miércoles.

Rodgers se refería a que la ofensiva de Green Bay tuvo una sola mala actuación después de cuatro partidos excepcionales. Los Packers habían anotado al menos 30 puntos en cada uno de sus cuatro duelos y no habían perdido ningún balón antes de la derrota 38-10 ante Tampa Bay.

“Está en cada uno de nosotros, individualmente ser críticos, aprender y crecer, y posteriormente dejar esto atrás como un grupo ”, admitió Rodgers. “En este momento seguimos adelante. Estamos pensando en Houston y así es la liga. No importa si juegas bien y estás ganando, es igual. No puedes lamentarte del duelo anterior, especialmente cuando ya es miércoles. Estamos con el siguiente rival y seguimos”.

El entrenador de los Texans Romeo Crennel dijo que no espera que los Packers cometan los mismos errores que contra Tampa Bay. Rodgers lanzó dos intercepciones en el segundo periodo que ayudaron a que los Bucs le dieran la vuelta al encuentro luego de estar abajo 10-0.

Esto significó la primera vez que Rodgers tuvo múltiples intercepciones en un juego de temporada regular desde que lanzó tres en la derrota ante Carolina el 17 de diciembre del 2017. Tuvo dos intercepciones en la derrota 37-20 en el duelo por el campeonato de la Conferencia Nacional ante San Francisco el año pasado.

Lanzó cuatro intercepciones durante toda la temporada regular pasada y apenas dos en 2018. Rodgers estaba jugando a nivel de MVP en los primeros cuatro duelos de la campaña, completando el 70,5% de sus pases para 13 touchdowns y sin intercepciones, antes de terminar con 13 de 35 y sin pases de touchdown en Tampa Bay.