Los Celtics sacaron la ‘escoba’ y se clasificaron a las semifinales de la Conferencia Este. Boston volvió a aprovecharse de la pobre ofensiva de los 76ers de Filadelfia para vencerlos 110-106, con lo que sellaron la serie con un categórico 4-0. Ahora esperan por el ganador de la eliminatoria entre Raptors y Nets.
Jason Tatum fue una vez más el jugador más determinado de la franquicia más ganadora en la historia de la NBA, al aportar un ‘doble-doble’ de 28 puntos y 15 rebotes. Además, Kemba Walker añadió 32 unidades.
Los 76ers solamente tenían la ilusión de evitar la barrida en los playoffs y Joel Embiid se había planteado no tener esa mancha negra en su historial, pero no lo logró.
Y en gran parte no le alcanzó por su falta de armas a la ofensiva. Durante toda la serie buscaron con la fuerza de Embiid en la pintura imponer condiciones, pero no les funcionó. Filadelfia es la peor quinteta de la postemporada en los tiros de larga distancia y en esta ocasión apenas tuvo el 26.5% de efectividad, al convertir 9 de sus 34 lanzamientos.
Boston se enfocó en contener al pívot camerunés, que acabó con 30 unidades, y esperar que sin Ben Simmons encontraran otra arma confiable en el ataque. Apenas Tobias Harris añadió 20 tantos, insuficientes para evitar la cuarta derrota de su equipo. Durante el tercer cuarto, Harris sufrió un duro golpe que lo hizo perderse prácticamente el resto del encuentro.
Los Celtics registraron 62 puntos en dos cuartos y sacaron una diferencia de doble dígito, misma que se mantuvo hasta los últimos minutos donde Filadelfia hizo más decoroso el resultado final.
Los pupilos de Brad Stevens dominaron a su rival en los rebotes (42-39) y las asistencias (19-11), nulificando las 15 pérdidas que sufrieron.
