Los altos niveles de exigencia y la creciente competitividad en el mundo del deporte han generado que cada vez se vean menos ejemplos de juego limpio; sin embargo, este sábado se ha presentado una de esas acciones que restauran la fe en la humanidad, durante un partido de la Liga Nacional de Futbol Sala de España.
Francisco Javier Solano, jugador del Jimbee Cartagena, tomó la decisión de no marcar un gol cuando estaba prácticamente solo ante la portería, debido a que una jugada antes habia chocado con Javi Alonso, del Fútbol Emotion Zaragoza, quien terminó tirado sobre la cancha.
El gran gesto del jugador cordobés fue reconocido por la afición presente en el Pabellón Siglo XXI de Zaragoza, ya que los árbitros del encuentro no habían señalado falta previa, por lo que de haber anotado, el tanto hubiera sido comletam,ente legal.
Al final, el cotejo terminó con un empate a cinco goles en omprom,iso correspondiente a la jornada 18 del torneo de Primera División.