Hace 24 años, Kurt Cobain, líder y guitarrista de Nirvana, se quitó la vida.
Días después, en su casa de Seattle (Washington), las autoridades encontraron el cuerpo, con una herida de bala en la cabeza y junto a él, la escopeta con la nota suicida: “Mejor incendiarse que ir consumiéndose de a poco…”, citando a su admirado Neil Young.
La partida de Kurt, compositor de himnos como “Smells Like Teen Spirit”, “In Bloom”, “Drain You” y “Come As You Are“, conmocionó al mundo. Su muerte fue la puerta hacia el “Club de los 27” (connotados artistas que fallecieron a esa edad).
Su muerte significó la disolución de Nirvana, pero sin duda, se transformó en uno de los máximos exponentes del género grunge. Sus canciones nunca dejaron de sonar y de hecho, hasta el día de hoy, la banda tiene más de 10 millones de oyentes mensuales en Spotify.