¡Ya No! Por favor…nadie nos ve.

No recuerdo cuando se formó el mundo, no sé si había paz o guerra, si el hambre y la polución ni si quiera se conocían, ni en el vocabulario y mucho menos en la escritura, miles de años de evolución y el hombre pensante se apropió de la tierra dejando atrás a otras especies humanas, si fue así, es porque la naturaleza nos regaló bastamente de sabiduría, tanta, como para dejar de ser creadores. Algunos filósofos por su forma creadora e inventiva infinita, han puesto al hombre en un pedestal de semidioses, de esos que con solo imaginar algo, lo lleva a desarrollar magníficas obras de arte, ingeniería, en medicina, inventos como el dinero que alguien lo señala como el objeto de mayor valor para la convivencia de los pueblos.

No menos atractiva la ciencia y la tecnología, que tan solo en cinco siglos hemos alcanzado la gloria de “pisar el universo”, los mismos terrenos donde habita Dios, el creador de todo y el destructor también, decía José Saramago “El Dios de los hombres es también el de las bestias”. La creación del hombre para beneplácito de Dios mismo es la bestia y los hombres tal vez desaparecieron. No serian hombres, pero si lo somos, una especie que ya ocupa el primer lugar entre todos los animales que destruye, se autodestruye y el mundo convirtiéndose en un desierto, no solo sin plantas, ni biodiversidad, también perdemos el raciocinio, aquello que se nos dio hoy es palabra pasada.

¡No Ahora No! Al clamor de ¡basta! ¡Ya no! Por favor… ya no, un lamento en el aire, que se esfuma ante los oídos sordos del político, lideres religiosos mundiales, aquellos que solo obedecen a moral retorcida y en ocasiones hipócrita, el político bajo su bandera de las ¡mayorías! Hace caso omiso al dolor ajeno, se convierte en un ente de bondad permitiendo el sufrimiento de las personas. Cuantas personas en este momento quisieran encontrarse con la luz del universo, ante tanta desesperación que le causan los terribles y angustiantes dolores por una enfermedad terminal, lo peor del caso en ocasiones, la enfermedad no los mata, los mata el dolor.

Para bien morir, satisfecho de la vida, amado por su madre, a sus 14 años José Armando Guzmán decidió ¡ya no más! Ni quimioterapias, ni tratamientos, después de 8 años de padecer leucemia, 120 quimioterapias, cientos de piquetes, medicamentos vomitivos, José decidió que era mejor disfrutar la vida, aun cuando fuera por un día, su madre a pesar de su dolor aun mantenía la esperanza, pedía sangre entre amigos, pero al final se rindió, prefirió darle la satisfacción al aficionado numero 14, del equipo Cruz Azul que era su hijo, en contra y a pesar de su pena, ante todo y después de todo, se entregó sin reserva al deseo de José, para morir con dignidad.

Si por alguna razón o fuerza moral te arrastra a negarle a algún ser querido, el derecho pleno de decidir por su vida, sea un niño, quien por ley está a tu cargo o un desvalido postrado, así sean los propios padres, hay que armarse de valor y en ocasiones liberarnos del egoísmo por sufrir la pérdida, recordando que ellos sufren no solo pena moral, sino física, dolorosamente asfixiante.

Para alcanzar leyes que otorguen al ciudadano el derecho libre de abandonar su vida, requerimos de políticos vanguardistas, idealistas, con objetivos sociales no políticos, nadie habla de estos problemas. En México en este momento 478 000 personas están con graves sufrimientos en estado terminal, de este número de enfermos 230 mil fallecieron en 2023, equivale a un 37 % de las muertes anuales.

José Mujica en una entrevista de esas donde la filosofía brota con tal elocuencia que invita a la reflexión. “ La política contemporánea tiene algunas enfermedades”, en este tiempo la peor enfermedad, es el desdén de los jóvenes por la política, “ la política ya no los enamora”, “ los jóvenes de mi tiempo se enamoraban y que eso nos permitió hacer cosas importantes”, “fuimos capaces de dejar trabajos, ir presos, jugarnos las vida y todo lo demás, porque creíamos en algo”, “la política actual es una mercadería”. Y sí, ya no se tienen ideales, solo políticos ocasionales, sin formación, ni voluntad de cambiar, mucho menos ver por el otro, fijarse en sus carencias es como hablarle al sordo en la obscuridad, no se tiene la empatía suficiente con el desvalido, mucho menos cuando se trata de temas como, la eutanasia, el aborto, el ayudar al otro a bien morir, lo único que se les ocurre a los políticos es correr a un hospital, abrazar a un niño en etapa terminal, cumplirle su último deseo, para después aparecer en le Jet Set, la revista de moda, o en algún programa televisivo donde da lo mismo, bailar ridículamente, que llorar ante un enfermo terminal.

Hay temas cruciales para la vida nacional, politicas de salud obscenamente ridículas, apartadas de la realidad, durante años, desde hace 40 precisando, la salud se convirtió en tema de quinta preocupación, les importaba más desmantelar para privatizar, que los servicios de salud se convirtieron en una lucha de clases, “primero privatizo, después te curo y cuando pueda te entierro”.
Preocupaciones

En un artículo anterior exponía la necesidad de proteger meticulosamente a los tres candidatos a la presidencia de la república, hay demasiados demonios sueltos, odio y crimen.
Palestina.

Con mil tanques Israel, se prepara para entrar en Rafah, seguramente morirán miles de niños y mujeres inocentes, y a Benjamín (mano derecha de dios) Netanyahu, nadie ni Biden lo puede sancionar. Es un genocida que debe ser juzgado.

35 000 estudiantes en Estados Unidos se movilizan a favor de un Estado Palestino y fin del asesinato en masa de parte de Israel.
Semana 22 al 26 de abril, 34 789 muertos. 2000 de la resistencia de Hámas.

Buena suerte.

Nos saludamos pronto
Oscar Esquivel .