La Flor de la Paciencia, también conocida como Begonia Dichotoma Jacquin por su nombre científico, es una extraña especie que abre sus pétalos cada 7 años y los cierra en tan solo 7 días.
Se identifica como una planta de tipo apoyante, pertenece a las Begonias y con su nombre rinde honor a Michel Begón, un ex gobernarte de Haití.
¿En dónde crece la Flor de la Paciencia?
A pesar de que la especie es originaria de países tropicales de América, con un clima cálido, como Colombia, Venezuela y Brasil, también se la encuentra con frecuencia en Asia y África.
Y, si bien las posibilidades son menores, los científicos aseguran que en la actualidad es posible hallar un ejemplar de la Flor de la Paciencia en cualquier lugar del mundo.
¿Cuáles son las características de la Flor de la Paciencia?
A simple vista, es posible identificar a la Flor de la Paciencia como una plata de baja estatura, con abundantes pétalos, que alcanza un metro de longitud.
Es decir, se trata de una planta de tipo apoyante, que cuenta con hojas en forma de haz y pétalos que, en la mayoría de las ocasiones, suelen ser de color blanco o rosado.
Finalmente, otro dato interesante de las Begonia Dichotoma Jacquin es que se subdividen en, al menos, 1.000 especies más. Por lo tanto, es muy fácil confundirlas con otras plantas de características similares.
¿En qué variedades se presenta la Flor de la Paciencia?
Hasta el momento, los especialistas han encontrado dos variedades en la especie de la Flor de la Paciencia.
Por un lado se encuentran las “perennes” y, por el otro, las “anuales”, que a su vez se divide en otros tres grupos más pequeños:
1. Begonias semperflorens - Se caracterizan por tener una floración continua y por no tolerar ni el frío y ni la luz directa.
2. Begonias rizomantosas - Tienen un gran follaje, por lo tanto, son habituales en los jardines botánicos.
3. Begonias tuberosas - De los tres tipos, las “tuberosas” son las que tiene las flores más grandes.
¿Para qué se utiliza la Flor de la Paciencia?
Al tratarse de una planta tan particular, suele ser muy solicitada para regalársela a una persona y demostrarle, con el gesto, que no tienes problemas de esperarla o acompañarla en un momento delicado.
Sin embargo, en algunos países también es adquirida por sus propiedades medicinales, ya que la Flor de la Paciencia desarrolla la capacidad de cicatrizar úlceras y llagas de la piel.
