Ocho firmas consultoras de distintas especialidades, tanto regiomontanas, como de Ciudad de México y Querétaro, conformaron un consorcio que pretende acelerar la llegada de nuevas inversiones que buscan relocalizar sus operaciones en México, en la tendencia del nearshoring, ante eventuales cuellos de botella regulatorios o de infraestructura.
Fernando Lerdo de Tejada, vocero del consorcio Nearshoring Consultoría y Servicios (NCSS), dijo que en el frente común buscarán ayudar a los inversionistas que llegan a México y desconocen en donde están las condiciones de infraestructura, servicios y capital humano que requieren para operar.
Incluso, contemplan integrar a más socios a su consorcio de entidades como Jalisco y Puebla.
"Las ganancias potenciales que tenemos previstas por la inversión que viene a relocalizarse a México son por cerca 168 mil millones de dólares en los próximos cinco años", estimó.
"Pero necesitamos prepararnos en distintos factores, y el primero es de visión: anticiparnos a lo que viene y definir tendencias de mercado y la resolución de problemas de electricidad, agua, infraestructura y de seguridad".
El consorcio lo conforman en materia legal las regiomontanas Degal Abogados; Inncom, para apoyo en innovación, tecnología y talento; Estrategia Total, para apoyo de asesoría política y Lobbying; así como la queretana Ceih, con soluciones sostenibles para espacios industriales, y la capitalina Latam Finance, en temas de soluciones energéticas, e incluso expertos consultores para la comunidad china.
Natividad González Parás, socio de Estrategia Total y ex Gobernador de Nuevo León, consideró que aun cuando existe competitividad para la atracción de inversiones, está concentrada en regiones que cuentan con ventajas.
Jaime Parada de Inncom, recordó que México tiene un Producto Interno Bruto per capita de 10 mil dólares por persona y es la potencia económica número 15, pero requiere llegar al menos a 30 mil dólares en ese indicador, y pasará tiempo para alcanzar niveles como los de Japón de 60 mil dólares.
"El primer ingrediente es inversión, que sea equivalente al 25 por ciento del PIB, y que en un 95 por ciento sea privada, que haya calidad en el empleo, pues hay 5 millones de jóvenes en nuestras universidades y 250 mil en posgrado y el buen empleo no se los vamos a dar
haciendo huaraches o dulces regionales, se nos van a ir".
Edgar Gómez, de Latam Finance, destacó la necesidad de agilizar la tramitología para desarrollar infraestructura energética que ya es insuficiente.
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