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Urge a aprovechar el 'mexican moment'

Agencia Reforma | 12/04/2024 | 11:06

Para aprovechar el "mexican moment", miembros de la American Chamber (Amcham), Capítulo Noreste, urgieron en trabajar para mantener sin cambios que afecten el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en una mayor integración de las cadenas de valor y en el impulso de la regionalización dentro de Norteamérica.

Lorenzo Barrera, presidente ejecutivo del Consejo Grupo Financiero Base y quien asumió ayer la presidencia de la Amcham en el noreste, dijo que en este momento histórico y sin precedentes, se deben defender políticas que promuevan la competitividad en una agenda que fortalezca el comercio y la relación de socios.

"Estamos creando el 'mexican moment' en Norteamérica... y hoy más que nunca tenemos retos sin precedentes", afirmó.

"Buscamos crear un ambiente de negocios que fomente el desarrollo de negocios, a través de la promoción de la creación de empleos y un continuo crecimiento de la economía".

Durante la edición 51 de la Asamblea General de Socios, Barrera señaló que parte de esos retos implican que durante la revisión del T-MEC no haya modificaciones que puedan afectar el comercio.

En el evento David Eaton, quien entregó la estafeta de la presidencia a Barrera, repitió la frase de Shannon K. O'Neil, vicepresidenta del Consejo de Relaciones Internacionales: "La globalización no ha muerto".

Ahora todo se está moviendo de manera regional, y por ello dentro del bloque de Norteamérica es necesario crear enfoques regionales, como por ejemplo, la forma en que se está haciendo aquí en el noreste.

Por esta razón, la Amcham acaba de migrar de ser Capítulo Monterrey a Capítulo Noreste, y con lo cual su área de cobertura es de siete ciudades en Nuevo León, Coahuila, San Luis Potosí, Tamaulipas, Durango y Laredo, Texas.

En el evento, Mark C. Johnson, subjefe de Misión de la Embajada de Estados Unidos en México, refirió que ya hay una ruta trazada de compromisos con México y Canadá, que incluye el desarrollo de las pymes, el de la industria de chips.

Así como el impulso de programas para capacitar y elevar el lenguaje técnico y de forma muy local por regiones, como en Nuevo León donde hay sinergias con el Conalep y con la Secretaría de Educación.