Cada mujer experimenta la Menopausia de manera única, y el tratamiento debe ser personalizado para adaptarse a sus necesidades específicas.
Qué es la Menopausia
La Menopausia una etapa natural e inevitable en la vida de una mujer cuando sus ovarios dejan de producir óvulos y su menstruación se detiene.
En México suele ocurrir alrededor de los 48 años en promedio, puede variar por factores como la genética, la salud y el estilo de vida.
Algunas mujeres pueden experimentar la Menopausia desde los 40 años, mientras que otras pueden llegar a ella después de los 50 años.
Climaterio
El Climaterio, por su parte, se refiere al tiempo alrededor de la Menopausia y puede iniciar años antes de la Menopausia y continuar años después de terminar la menstruación.
Este término suele utilizarse al describir los síntomas que produce, mientras que el de Menopausia se enfoca en la terminación de los ciclos menstruales.
Etapas y síntomas
Es importante señalar que la Menopausia no es un evento único, sino un proceso gradual que puede durar varios años mientras disminuye la producción de hormonas.
A medida que los niveles de hormonas bajan, se experimentan diversos síntomas y cambios en el cuerpo.
Dependiendo de los síntomas y la cantidad de hormonas podemos dividirla en 3 etapas principales:
La premenopausia es el período fértil antes de iniciar los cambios hormonales.
La perimenopausia es el período previo a la última regla, que puede durar hasta cinco años.
Por su parte, la postmenopausia es cuando ya ha pasado más de 12 meses después de la última menstruación.
Suelen observarse alteraciones por los cambios en el metabolismo. Como disminución de calcio en el interior de los huesos.
Según los síntomas, la dividimos en:
Temprana: es cuando inician los síntomas característicos, lo ovarios aun producen hormonas. Inician los bochornos. Se pueden ver cambios en el ciclo menstrual, como ciclos irregulares, cambios en la duración o la cantidad del flujo menstrual.
Tardía: Las hormonas se encuentran en su punto más bajo. Se hacen más claros los síntomas por baja de estrógenos como resequedad vaginal y bajo deseo sexual.
Los síntomas pueden afectar de diferentes maneras a cada persona y disminuir la calidad de vida de las mujeres:
Cambios en el ciclo menstrual: en algunas mujeres el aumento del sangrado menstrual puede generar anemia o algunos otros síntomas relacionados como dolor.
Sofocos y sudores nocturnos: Conocidos como bochornos. Muchas mujeres experimentan oleadas de calor repentinas, generalmente en la parte superior del cuerpo, acompañadas de sudoración intensa.
Cambios en el sueño: La Menopausia puede afectar la calidad del sueño, causando insomnio o dificultad para conciliar el sueño.
Cambios en la libido: La disminución de las hormonas sexuales puede influir en el deseo sexual y la lubricación vaginal.
Cambios en la piel y el cabello: La piel puede volverse más seca, y el cabello puede volverse más delgado y perder brillo.
Cambios en el estado de ánimo: Las fluctuaciones hormonales pueden contribuir a cambios emocionales, como la irritabilidad y la ansiedad.
Tratamientos
El tratamiento para los síntomas de la Menopausia varía según la intensidad de los síntomas y la preferencia de la mujer.
Es importante una evaluación completa para valorar cual es el mejor tratamiento para los síntomas de la paciente y determinar si es candidata a estas terapias
Terapia de Reemplazo Hormonal: Implica la administración de hormonas, como estrógeno y progesterona, testosterona y algunas otras, para compensar la disminución de estas hormonas durante la Menopausia. Puede ser administrada en forma de píldoras, parches, cremas o geles.
Medicamentos no Hormonales: Pueden ser útiles para aliviar síntomas específicos sin el uso de hormonas. Ayudan a controlar síntomas como los sofocos.
Terapias Alternativas y Complementarias: El cuidado de la salud depende de múltiples disciplinas, esto continua en la Menopausia donde el cuidado físico y psicológico es fundamental
Consejos para el cuidado personal
Es importante complementar el tratamiento médico con un estilo de vida saludable y cambios en algunos hábitos que pueden ayudar a mejorar los síntomas:
Ejercicio regular: La actividad física regular no solo ayuda a mantener un peso saludable, sino que también puede reducir los síntomas como los sofocos y mejorar el estado de ánimo.
Manejo del estrés: Técnicas de relajación, como la meditación y el yoga, pueden ayudar a manejar el estrés, que puede agravar los síntomas de la Menopausia.
Consulta médica regular: Es importante continuar un seguimiento aun después de que los síntomas terminen, para poder prevenir cambios que afecten la calidad de vida y el estado de salud general.
¿Y si no tengo síntomas?
Además del tratamiento enfocado en los síntomas, es importante prevenir los cambios físicos que se presentan en esta etapa y que pueden afectar tu salud.
La prevención de la atrofia vaginal: la resequedad vaginal puede favorecer la presencia de infecciones urinarias o vaginales. También contribuye en los cambios que generan la incontinencia urinaria o escapes de orina.
Evitar la osteoporosis: estos cambios pueden ser muy graduales y no notarse en los primeros años, pero es importante evitar una fractura por huesos débiles.
Cambios cardiovasculares: los cuidados incluyen disminuir el riesgo cardiaco para evitar a factores de trombosis o infartos.
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