Martes 7 de Mayo de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.
Ricardo Godina | 18/03/2024 | 13:52
La muerte de un escritor no siempre marca el fin de su obra. En muchos casos, la pluma sigue siendo una voz resonante más allá de la vida del autor. En un fenómeno que resalta la inmortalidad de la literatura, numerosas obras han visto la luz tras el fallecimiento de sus creadores.
El Castillo - Franz Kafka
La obra surrealista "El Castillo" de Franz Kafka, vio la luz en 1926, un año después de la muerte del autor. Esta novela continúa cautivando a lectores con su narrativa intrigante y su exploración de temas existenciales. Kafka, conocido por su estilo único y su habilidad para capturar la alienación y la absurdez de la vida moderna, dejó un legado perdurable en la literatura mundial.
Ariel - Sylvia Plath
"Ariel", una colección de poemas de Sylvia Plath, fue publicada en 1965 después de su trágica muerte. Estos poemas, caracterizados por su intensidad emocional y su ingenio poético, consolidaron la reputación de Plath como una de las voces más influyentes de la poesía contemporánea. Su obra sigue siendo estudiada y admirada por su poderoso impacto en la literatura y la sociedad.
La chica del tren - Paula Hawkins
A pesar de la muerte de Paula Hawkins en 2009, su thriller psicológico "La chica del tren" vio la luz en 2015 y se convirtió en un éxito comercial internacional. Esta novela, que cautivó a los lectores con su intriga y sus giros inesperados, consolidó el lugar de Hawkins en el género del thriller psicológico y demostró el impacto perdurable de su talento narrativo.
En agosto nos vemos - Gabriel García Márquez
La obra póstuma de Gabo muestra una trama intrigante que gira en torno a Ana Magdalena Bach, quien cada mes de agosto viaja en transbordador hasta la isla donde está enterrada su madre para visitar su tumba.
