Electriza Billy Idol al Vive Latino con un show inolvidable

Con puntualidad británica y una energía indomable, Billy Idol hizo su esperado debut en el escenario principal del Vive Latino.

Enfundado en una chaqueta roja, el legendario músico de 68 años irrumpió en el escenario con su clásico "Dancing With Myself" del álbum 4 lanzado en 1981.

Desde las primeras filas hasta el último rincón del festival, la multitud aclamaba a Idol como una auténtica leyenda del rock. A pesar del calor, los fans aguantaron para presenciar su espectáculo en primera fila, disfrutando de cada movimiento y palabra del icónico artista.

"Es fantástico estar aquí México. Tengan un maldito gran momento", saludó el músico.

Acompañado por Steve Stevens en la guitarra, Idol recorrió sus clásicos, incluyendo "Eyes Without a Face" y "White Wedding", deleitando al público con su presencia escénica inigualable.

Sus cambios de vestuario, desde chaquetas de cuero negro hasta diversas camisetas, añadieron un toque extra de estilo a su actuación.

Entre canciones, interactuaba con la audiencia, animándolos a gritar y aplaudir aún más fuerte.

"Yo sé que ustedes sólo se saben dos palabras, son las dos más importantes, grítenlas, son: Rebel Yell", dijo el artista para dar paso a su más grande éxito.

A medida que avanzaba su actuación, algunos espectadores se dirigían al escenario secundario para presenciar el regreso de Belanova después de casi seis años de inactividad.

Sin embargo, los fieles seguidores de Idol permanecieron hasta el final, disfrutando de clásicos como "Hot In The City" antes de que el músico se despidiera a las 22:10 horas, dejando una impresión duradera en todos los presentes en el Vive Latino.