La batalla legal entre Meghan Markle y su media hermana, Samantha Markle, llegó a su fin con una victoria para la Duquesa de Sussex. En un fallo, la Jueza del Distrito de los Estados Unidos, Charlene Honeywell, desestimó el caso de difamación presentado por Samantha contra Meghan, informó People.
El caso se originó a raíz de múltiples entrevistas en las que Samantha, de 59 años, acusaba a Meghan, de 42, de difamarla y arruinar su reputación. Sin embargo, la jueza Honeywell encontró que las afirmaciones de Samantha no estaban respaldadas por pruebas sólidas. En sus documentos judiciales, Honeywell destacó que las acusaciones de Samantha parecían más relacionadas con discrepancias de opiniones que con declaraciones de hechos verificables.
Samantha Markle, quien es media hermana de Meghan por parte de su padre, Thomas Markle, no podrá volver a presentar la demanda, ya que fue desestimada con prejuicio. La demandante buscaba obtener 75 mil dólares en daños por lo que denominaba "mentiras maliciosas, hirientes y dañinas", de parte de la Duquesa de Sussex.
La disputa entre las hermanas estuvo marcada por acusaciones y contra acusaciones. Samantha afirmó que Meghan la difamó durante una entrevista con Oprah Winfrey, alegando que Meghan había hecho declaraciones falsas sobre su infancia y su relación con su familia. Sin embargo, la jueza Honeywell no encontró mérito en estas afirmaciones.
El fallo también abordó las acusaciones de Samantha relacionadas con el capítulo "Un Problema como Samantha", del libro "Finding Freedom", que detalla la vida de Meghan y el Príncipe Enrique. La jueza determinó que Meghan no podía ser responsabilizada por declaraciones en un libro que no había publicado personalmente, y que muchas de las afirmaciones de Samantha eran meras opiniones protegidas por la ley.
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