El Gobierno de Perú aprobó una política para reactivar y promover la artesanía con una partida de más de 5,17 millones de soles (1,3 millones de dólares) que estará dedicada a otorgar subvenciones a trabajadores de este sector que ganen un concurso público.
'Somos artesanía 2024' es el nombre esta estrategia publicada este domingo en el diario oficial El Peruano y detallada en una resolución ministerial.
La norma indica que el artículo 24 de la Ley del Artesano y del Desarrollo de la Actividad Artesanal, establece que el Estado reconoce a la artesanía como "un recurso turístico incorporable en todos los productos turísticos del Perú".
Así, para el año fiscal 2024, el Ejecutivo asignó al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo la suma de 5,17 millones de soles para financiar las subvenciones a los ganadores del concurso público, que se llevará a cabo en el marco de esta estrategia para promover la producción, promoción, comercialización y articulación comercial de la artesanía.
Estas ayudas económicas serán dirigidas para fortalecer talleres de artesanía y la articulación de estos espacios con los destinos turísticos priorizados en el país, mejorar la productividad y competitividad artesanal, así como el desarrollo de experiencias creativas que generen vínculos entre el artesano, el visitante y el entorno.
Y serán otorgadas a favor de las unidades económicas artesanales, integradas por personas naturales con negocio y personas jurídicas de la actividad artesanal beneficiarias de la estrategia, así como las disposiciones operativas, de gestión, de monitoreo y seguimiento.
Hace una semana, la Asociación de Exportadores (Adex) informó que en 2023, la demanda por artesanía peruana creció fuertemente en Dinamarca (276,9 %), Países Bajos (233 %) y Suiza (119,5 %) respecto al año anterior.
"Esta mayor demanda demuestra la gran aceptación de la artesanía peruana en el mundo”, destacó el gremio exportador.
Detalló que las exportaciones de artesanía peruana al mundo sumaron 39,46 millones de dólares en 2023, una cantidad un 15,9 % menor respecto al 2022, principalmente por la menor demanda de Estados Unidos, que es el principal destino para este tipo de despachos.
