La revolución de los pedantes

Vamos entendiéndonos, dice un político, yo emano de la soberanía del pueblo quien me eligió para representarlos, de esta manera ejercer el poder que me otorgan las leyes, pero en cambio ustedes son simplemente una masa amorfa de pueblo que se cree sabio e indulgente ante nuestros desatinos.

El político hábil recurre a la retóricapara generar confianza, además practica el arte del uso de las palabras, como su sentido e influencia sobre los ciudadanos. Que sucede cuando todos ellos se juntan, para hacernos su presa política, que normalmente termina siendo fieles militantes de un lado o de otro. En la búsqueda del poder gracias a sus finos y demagógicos discursos, se encargan de inflar la corrupción, dejando al descubierto la frágil condición humana, generan turbulencias, para después hacer creer que las soluciones a los problemas sociales las tienen ellos, como también dirán, que si el pueblo tiene amor a la patria construya y se haga artífice de las leyes y de la política como instrumento para hacer el bien. Cuanto no escuchamos y nos conmovemos, votamos, magnifican la democracia, para hacernos sentir parte de su espíritu político, sin embargo, aun cuando el pueblo lo desee nunca podrá este ser un legislador, desafortunadamente tendremos solo la opción de elegir a uno, aunque sabemos que nunca llevarán nuestras necesidades a plantearlas para encontrar un bien común, siempre aparecerá el factor ideológico y peor aún, los intereses de grupos.
“Dadme una ley en Atenas que no las dictase un demagogo, un orador turbulento o un genio hábil para engañar” Juan Pablo Forner.

Este filósofo español del siglo XVII en su obra Exequias de la lengua Castellana, no dejaba de hacer críticas contra el sistema, sus instituciones y las clases dominantes, entre ellos los políticos de la época, cosas que vivimos en la actualidad, sucedieron y han sucedido siempre. Los pueblos obedecerán las normas que les dicten los gobiernos impuestos por el mismo pueblo. La democracia estará manchada y en peligro de muerte, porque la democracia se ha convertido en un mensaje para desarrollar batallas.

“La ambición de pocos, se disputan la facultad de subyugar al pueblo, a costa de la inquietud, la sangre y miseria del mismo pueblo” JPF.Esos “pocos” se creen dioses, santos, tiranos, demócratas y hasta iluminados, alardea de su conocimiento muchas veces equivocado, nace la pedantería política, que no es más que el reflejo de su parasitaria ambición para mantener sus privilegios.La palabra pueblo les molesta.

La derecha mexicana en su afán de volver a sobresalir, en voz de la connotada y no siempre bien vista Margarita Zavala, pidió ante los diputados, reformar la constitución para que la palabra “pueblo “no sea utilizada para excluir a la otra parte del pueblo, ¡qué barbaridad! Cuantos tipos de pueblos habrá para ella, que se siente tan excluidos del pueblo, este se compone de ricos y pobres, religiosos, políticos buenos y pedantes, corruptos, delincuentes, interminable la descripción de quienes si son pueblo, la oposición  tan ocupadaestá en ser incluidos en el discurso del presidente, que se olvidan de lo verdaderamente importante, como traer de Estados Unidos a Cabeza de Vaca exgobernador de Tamaulipas y candidato plurinominal de Acción Nacional, para que sea juzgado en México por su nexos con el narcotráfico, o repatriar  a Felipe Calderón, que no se atreve a pisar el país, por miedo al pueblo que tanto agravió.

Nunca como antes, en la historia reciente de México, se había esperado tanto un cambio político del país; en el año 2000 Vicente Fox arriba a la presidencia, con mucha esperanza del pueblo en mejorar su economía, la salud, seguridad, ¿y qué ocurrió? la pedantería presidencial se hizo presente , la corrupción, negarle al ciudadano  todo lo que fuera bienestar para sus familias, como resultado,  se manifestó en un incremento de la pobreza, la violencia estaba a punto de estallar y el “chachalaca” no hizo nada, volteo a ver solo a su interés personal y familiar, rancho, marihuana, poder.

Hace unos días, confesó este impresentable de Fox que había intervenido en la elección del 2006 a favor de Calderón, el señor de las balas, ¡entonces si hubo un fraude!, sí hicieron perder a López Obrador con su guerra sucia de “un peligro para México”.  Lo extraño está, que los medios tradicionales de comunicación han hecho “mutis” ante tal confesión, los funcionarios del IFE de aquel entonces deben ser juzgados por violar la soberanía del pueblo, por permitir tales agravios, la democracia fue apuñalada, o tal vez comenzó a desfallecer
“haiga sido como haiga sido” la respuesta de Calderón.No eliminaron políticamente López Obrador, fue un agravio al pueblo de México.  

Hay una crisis moral ante la altanería de los políticos, se lucha desde trincheras con armas de desprestigio, descalificaciones, la intolerancia esta presente cada momento. Los candidatos te muestran su mejor cara, su sonrisa y su verbo, pero sin esencia ideológica en la mayoría de los casos.Ocurrencias como construir una mega cárcel al estilo del presidente Bukéle de Salvador, donde los seguidores de Xóchitl Gálvez, imaginen a los criminales en calzoncillos blancos, en un patio siendo sometidos por la fuerza pública y de esa manera otorgarle un voto de confianza a la candidata PRIANISTA. ¡Vaya cosa! No requerimos cárceles de alta seguridad, urge una reforma al Poder Judicial, los ministerios públicos, hasta el modelo actual de Fiscalías, acabar con la impunidad y la corrupción. Eso es prioridad.

Palestina,

7 de marzo.Muertos en la guerra en la Franja de Gaza supera las 30 556 el 85% son civiles incluidos menores.

Predicción: Joe Biden perderá la elección, entre otras cosas, su política  permisiva del genocidio judíoisralita, al pueblo palestino.

Nos saludamos pronto.

OSCAR ESQUIVEL