5 pasos para tratar una mordedura de perro

Incluso los perros amistosos pueden asustarse de vez en cuando. Si usted o su hijo han tenido un encontronazo con un perro asustado o agresivo, sabe que una mordedura ocurre rápidamente. Un poco de planificación puede ser de gran ayuda para asegurarse de que reacciona de la manera correcta en el momento.

Para comprender los peligros y el tratamiento de las mordeduras de perros, nos comunicamos con Jasjot Johar, DOCTOR, especialista en medicina de emergencia de Banner Health en Loveland, CO. Él explicó cinco pasos simples a seguir si lo muerde un perro. Incluso para aquellos que tienen experiencia con perros, sugirió revisar estos pasos para garantizar la recuperación más rápida.

1. Respira hondo

“Cuando un animal muerde, es fácil entrar en pánico”, dijo el Dr. Johar. “Incluso una mordedura de perro pequeña a moderada puede ser muy dolorosa, debido a la naturaleza aplastante y desgarradora de la lesión. Mantenga la calma, evalúe la herida, pida ayuda si es necesario y tome medidas”.

Mantén la calma controlando tu respiración. Aléjate de la situación y busca a alguien que te ayude si lo necesitas. Si es posible, hable con el dueño para verificar que el perro esté al día con las vacunas contra la rabia. Por supuesto, es posible que no tenga tiempo para hablar con el dueño del perro que lo mordió y, en algunos casos, es posible que el dueño no esté cerca. El Dr. Johar aseguró que se pueden dar tratamientos contra la rabia cuando se desconocen esos factores.

2. Limpiar la herida

Use jabón y abundante agua para lavar la herida de la mordedura de perro. Tendrá que fregar a fondo para reducir el riesgo de infección. El Dr. Johar explicó que la infección es una preocupación real, sin importar cuán grave sea la mordedura del perro. No dude en buscar atención médica en un departamento  o emergencias.

3. Aplicar presión

Use un paño limpio para aplicar presión sobre la herida. En algunos casos, la picadura puede haber desgarrado venas y arterias. Si el sangrado no se detiene en unos minutos, vaya directamente a un departamento de emergencias. 

4. Aplicar antibióticos y un vendaje

Las heridas menores se pueden tratar en casa. Después de una limpieza cuidadosa, trate los cortes pequeños con cremas antibióticas y un vendaje. Las heridas más grandes pueden requerir puntos, gasa o cinta de un médico experto. “Independientemente de cómo (o si) se cierra, es importante cuidar la herida después. Lave el área al menos una vez al día con agua y jabón. No se necesitan limpiadores especiales para heridas y evite el peróxido ya que no será beneficioso. Aplique pomada antibiótica (una capa ligera) y cambie los vendajes una vez al día o antes si se mojan o ensucian”.

5. Obtenga ayuda

Es posible que las mordeduras de perro moderadas a graves deban tratarse en un departamento de centro de urgencias o emergencias. El Dr. Johar explicó: “Si su herida es profunda, sangra persistentemente o si lo mordieron en la cara o las manos, es hora de visitar a un profesional médico. Es posible que necesite puntos de sutura, medicamentos medicamento recetado u otros tratamientos, incluida una vacuna contra el tétanos, que simplemente no puede conseguir en casa. No se arriesgue a una lesión prolongada o una infección grave posponiendo el cuidado de una mordedura de perro”.

Prevención de mordeduras de perros

Si ve un perro suelto, proceda con cuidado. Los perros perdidos suelen estar agitados y asustados. Incluso su lenguaje corporal más amigable podría asustar al perro para que huya o posiblemente lo ataque. Si el perro muestra signos de miedo, su mejor opción será ponerse en contacto con la policía o el control de animales mientras mantiene al perro a la vista.

Para los amantes de los perros, este tipo de sujeción puede ser muy difícil. Sobre todo si el perro parece asustado o está en peligro. Recuerda, si quieres ayudar al perro, también debes mantener la calma y la seguridad. Actuar precipitadamente podría ponerte a ti y al perro en mayor riesgo.

Enseñar a los niños a no acercarse a mascotas extrañas

Si tiene un amigo peludo en casa, es posible que sus hijos sean menos cautelosos con los perros en otros entornos. Enseñe modales buenos y seguros a sus niños explicándoles que no todos los perros juegan de la misma manera y que siempre debe preguntarle al dueño si está bien conocer a un nuevo perro. Esté presente con sus niños para asegurarse de que sean amables y traten al perro con respeto.

Incluso los ruidos fuertes o los movimientos repentinos pueden hacer que un buen perro entre en pánico. Algunos perros que tienen buenos modales en casa pueden ponerse a la defensiva rápidamente, protegiéndose a sí mismos o a sus dueños de los peligros percibidos. Si está jugando en un parque o caminando por una calle pública, asegúrese de que su hijo no esté estresando demasiado a un perro.