Nunca imaginé

LLÁMEME INOCENTE, INGENUO O iluso, pero después de escuchar por catorce años a Andrés Manuel López Obrador asegurar que, si él llegara a ser el primer mandatario de la Nación, se extirparían de raíz muchos y dolorosos vicios que dañaron sexenio tras sexenio a México.

NUNCA IMAGINÉ QUE MORENA, el partido que él creó, se convertiría en lo mismo, y hasta peor, de lo que tanto criticó. Que recurriera a los peores vicios, incluso superando las mañas del tricolor de los ochentas y noventas.

NUNCA IMAGINÉ QUE SE utilizarían los programas sociales para cooptar el voto y hasta obligar a la inocente gente a participar en las deslucidas “consultas populares” con la amenaza de quitarles los apoyos.

NUNCA IMAGINÉ QUE EL EJÉRCITO seguiría en las calles, ya que AMLO y la cúpula de su partido, cuando eran oposición, salían a protestar contra lo que consideraban una “militarización del país”.

NUNCA IMAGINÉ QUE, TRAS asegurar en campaña que tenía una estrategia muy diferente y efectiva, al quinto año de su sexenio se contabilizaran 170 mil homicidios, siendo que durante el periodo de Enrique Peña Nieto se registraron 156 mil.

NUNCA IMAGINÉ QUE TODOS LOS ex mandatarios del país, como Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, quedarán totalmente intocables, ya que López Obrador recibió muchos votos porque prometía castigo para quienes dañaron al país.

NUNCA IMAGINÉ LOS TERRIBLES escándalos de abuso, corrupción y jugosos negocios de los hijos, sus hijos José Ramón, Andy y Gonzalo.

NUNCA PENSÉ QUE SU PADRE LO permitiría. Lamentablemente no solo se los permite, sino que los solapa y encubre.

NUNCA IMAGINÉ QUE NO TUVIERA conocimiento de que Manuel Bartlett tuviera 23 residencias y 13 empresas con valor de más de 42 millones de pesos.

NUNCA IMAGINÉ QUE LE ABRIERA los brazos y aceptara en su partido y en su administración, a ex mandatarios y gente de otros partidos a los que antes consideraba como gente dañina y corrupta.

NUNCA IMAGINÉ CONOCER UN caso monumental de corrupción como el de SEGALMEX, por 15 mil 308 millones de pesos.

Y DIGO QUE NUNCA LO IMAGINÉ porque López Obrador y su partido Morena nos juraron una y otra vez, que eran totalmente diferentes a los demás.