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salud

Los efectos de la diabetes en el aparato urinario de los pacientes

Alimente+ / El Confidencial | 30/12/2023 | 20:26

La diabetes es una enfermedad crónica que puede llegar a tener una importante repercusión en el aparato urogenital de los pacientes que la sufren, fundamentalmente, por problemas en la vejiga e infecciones de las vías urinarias. En el caso de los hombres, además, suele coincidir con una mayor dificultad para tener una erección o eyacular, incluso también con una pérdida del deseo sexual a consecuencia de un déficit de testosterona. Por su parte, en las mujeres se manifiesta con un descenso de lubricación vaginal y de respuesta sexual.
 
La disfunción eréctil es la falta de capacidad para lograr una erección y mantenerla el suficiente tiempo con firmeza para poder mantener relaciones sexuales. Hay que tener en cuenta que en los varones con diabetes las posibilidades de padecer disfunción eréctil aumenta de dos a tres veces más que en la población que no la padece. No obstante, las tasas de prevalencia varían entre un 20% y un 75%. La eyaculación retrógrada es otro de los trastornos que sufren, un problema que provoca que el semen fluya hacia la vejiga en lugar de salir al eyacular. Esto sucede cuando los esfínteres no funcionan como deberían y provocan que el semen se mezcle con la orina y se expulse a través de la micción.
 
Los problemas urológicos y la diabetes mantienen una estrecha relación cuando la enfermedad causa complicaciones en los nervios y en los vasos sanguíneos. Cuando estos nervios, que reaccionan a estímulos de forma independiente, resultan afectados, provocan que el cuerpo reaccione aumentando el flujo sanguíneo hacia los genitales, propiciando en algunos casos alteraciones de la función normal.
 
Se calcula que más de la mitad de las mujeres y hombres con diabetes en España presentan disfunción vesical debido al daño de esos nervios que controlan la función de la vejiga. Entre los problemas de vejiga más comunes tanto en hombres como en mujeres prevalece el síndrome de vejiga hiperactiva, cuyos síntomas aparecen cuando aumenta la frecuencia urinaria en el paciente -ocho veces al día o dos o más veces por la noche-, la incontinencia urinaria -goteo- o la urgencia miccional inmediata. La retención de orina se presenta como otro problema en algunos pacientes que no pueden vaciar la vejiga en su totalidad y al acumularse tanto líquido este ejerce una presión que puede llegar a dañar los riñones. En ocasiones, se puede producir incontinencia por rebosamiento y en otros existe un grave riesgo de infección en los riñones o la vejiga en el caso de que la orina quede retenida en el cuerpo.
 
Cuando diagnosticamos a un paciente problemas en la vejiga, el abordaje suele comprender tanto el control de la función vesical como el aspecto de la parte interior de la vejiga. Para ello nos apoyamos en ecografías, pruebas urodinámicas para evaluar la función de la vejiga y la realización de una cistoscopia.
 
El riesgo de infecciones genitales por hongos es también muy frecuente en pacientes con diabetes, especialmente aquellas que afectan a la piel del prepucio -balanitis- que a veces llegan a requerir realizar procedimientos quirúrgicos como la circuncisión. Otras también recurrentes son la cistitis -las bacterias alcanzan las vías urinarias causando una infección en la vejiga-, la uretritis -las bacterias crecen en la uretra- y la pielonefritis -una infección de los riñones cuando no se trata a tiempo-.
 
En cualquiera de los casos, el urólogo debe pedir al paciente una muestra de orina para analizarla en busca de bacterias y en el caso de que las infecciones sean recurrentes se deberán realizar pruebas adicionales. El tratamiento antibiótico se pautará para prevenir infecciones en los casos más graves. Una de las recomendaciones que damos es tomar abundante cantidad de líquidos que ayuden a depurar y así prevenir otra infección.
 
Como ya sabemos, la diabetes es un factor de riesgo que aumenta las probabilidades de desarrollar ciertas patologías, pero hay que destacar que los pacientes que la padecen pueden disminuir el riesgo de tener problemas urológicos si son capaces de mantener la glucosa, la presión arterial y el colesterol en la sangre dentro de los niveles recomendados en cada caso.