Tener amigos es más beneficioso de lo que podría imaginar…
¿Cuáles son los ingredientes de una vida larga y sana? La mayoría de los expertos apuntan a cosas como el ejercicio, una dieta nutritiva, menos estrés, una buena atención médica y, aunque parezca mentira, una vida social.
Cada vez comprendemos mejor por qué las relaciones sociales son fundamentales para nuestro bienestar. A principios de este año, el Dr. Vivek Murthy, Cirujano General de EE. UU., publicó un informe sobre lo que él denomina una “epidemia de soledad y aislamiento”, en el que destacaba cómo la soledad es uno de los factores más negativos para nuestra salud.
Los adultos mayores corren un mayor riesgo de aislarse. Las investigaciones demuestran que la incidencia de la soledad aumenta y que las redes sociales se reducen con la edad. “La soledad es uno de los mayores problemas entre los adultos mayores y afecta gravemente a la salud y el bienestar”, explica la doctora Charlynn Ruan, psicóloga clínica y fundadora de Thrive Psychology Group.
Ahí es donde entran en juego las amistades. “Tener amigos es uno de los factores que más influyen en la salud física y mental en la vejez”, afirma la Dra. Raun. Y mientras que la familia ciertamente ayuda a cumplir con tu cuota de actividad social, las amistades ofrecen algo singular. “Las amistades absolutamente tienen un efecto diferente en nuestro bienestar”, dice Howard Pratt, DO, director médico certificado por la junta en Community Health of South Florida, Inc. “Elegimos a nuestros amigos; no elegimos a nuestra familia”.
1. Una vida más larga
Las amistades fuertes son un boleto de oro para la longevidad. Un exhaustivo meta-análisis de 2010, que reunió 148 estudios diferentes, encontró que las conexiones sociales fuertes aumentan las “posibilidades de supervivencia” en un 50%, lo que significa que ayudan a vivir más tiempo. La falta de ellas, por otro lado, tiene el efecto contrario: Las investigaciones demuestran que la soledad y el aislamiento social aumentan el riesgo de muerte prematura en un 26% y un 29%, respectivamente. En el informe del cirujano general de EE.UU., el impacto de la soledad en la salud se compara incluso con fumar 15 cigarrillos al día.
2. Sistema inmunitario y salud física más fuertes
“Las amistades y la conexión social no solo son buenas para el alma: son literalmente buenas para la salud”, dice la doctora Neha Chaudhary, psiquiatra del Hospital General de Massachusetts y directora médica de Modern Health.
La falta de conexión social se asocia con un mayor riesgo de enfermedad, por ejemplo. Esto incluye un 29% más de probabilidades de enfermedades del corazón y un 32% más de probabilidades de accidente cerebrovascular, según la investigación. La soledad puede incluso hacer que te resfríes con más frecuencia, pues la investigación demuestra que la falta de conexión social puede aumentar la susceptibilidad a los virus y las enfermedades respiratorias, incluyendo COVID-19.
3. Mejor salud cognitiva y memoria
“La interacción regular con amigos nos mantiene socialmente comprometidos, lo cual es importante para nuestra salud cognitiva”, dice Niloufar Esmaeilpour, MSc, RCC, consejera clínica registrada en Lotus Therapy & Counselling Centre en Vancouver. “Participar en actividades sociales puede ayudar a mantener la mente activa y reducir el riesgo de deterioro cognitivo”.
Las pruebas respaldan la relación entre la actividad social y los marcadores de salud cognitiva, como la memoria de trabajo, las capacidades visuales y espaciales, la velocidad de procesamiento y el funcionamiento ejecutivo general (un conjunto de habilidades que incluye aspectos como la planificación, el autocontrol y el seguimiento de instrucciones). La soledad tiene una influencia tan fuerte en la función cerebral que un estudio de 12 años que siguió a adultos mayores descubrió que las capacidades cognitivas disminuían un 20% más rápido en las personas que declaraban sentirse solas. Otros estudios han descubierto que el aislamiento social y la soledad crónica aumentan el riesgo de padecer Alzheimer y demencia, esta última hasta en un 50%.
4. Reducción del estrés, la ansiedad y el riesgo de depresión
Según Esmaeilpour, la amistad es beneficiosa para la salud emocional de muchas maneras, entre ellas como gran aliviador del estrés: “Reír y disfrutar con los amigos puede reducir el estrés, lo que a su vez tiene efectos positivos en la salud física, como la disminución de la presión arterial”, afirma, “los amigos también proporcionan apoyo emocional, que es vital para el bienestar mental”. A medida que envejecemos, podemos enfrentarnos a diversos retos, y tener amigos con los que compartir nuestras preocupaciones y alegrías puede ser una fuente de consuelo y fortaleza.
Además, la soledad está asociada a un mayor riesgo de ansiedad y depresión, según el médico cirujano general. Una revisión sistemática de múltiples estudios a largo plazo descubrió que las personas que dicen sentirse solas a menudo tenían el doble de riesgo de desarrollar depresión en comparación con las que dicen sentirse solas rara vez o nunca.
5. Mayor sentido de pertenencia
“Tener amigos da un sentido de pertenencia y propósito, lo que es particularmente importante en la vejez, cuando la gente puede retirarse del trabajo y tener más tiempo libre”, dice Esmaeilpour. Tener planes, una razón para levantarse y salir de casa y apagar las pantallas, puede ayudar mucho a dar vida y color a los días, sobre todo cuando ya no se trabaja activamente.
“Tus contactos sociales son a menudo una representación colectiva de ti y de tus valores”, dice el Dr. Pratt. “A veces nuestros contactos pueden ser una caja de resonancia para nosotros, y a veces pueden servir para confirmar nuestros puntos de vista”. ¿Aún mejor? Tener amigos que sean lo suficientemente honestos como para estar en desacuerdo contigo, dice. “La razón por la que eso es tan importante es que viene con tener un entendimiento de que aunque no esté de acuerdo contigo, sigo estando a tu lado”.
