Los calendarios adviento son la máxima expresión del espíritu navideño, pero, ¿sabes realmente cómo funcionan? Sí, posiblemente la mayoría de nosotros mucho nos hemos acostumbrado a verlos por todas partes durante la temporada decembrina y en sus múltiples versiones: desde las más clásicas y con sorpresas sencillas, hasta esas que ya conquistan el terrero de la moda y beauty; pero la realidad es que su historia va mucho más allá de ser un mero concepto decorativo o de consumo.
Y es que como toda tradición, estos encierran una serie de datos curiosos e interesantes que bien vale la pena tener presentes, especialmente si estás planeando comprar o hacer uno próximamente. Así que, ¡presta atención! Te contamos todo lo que debes saber al respecto.
¿Qué es un calendario de adviento y para qué sirve?
Tal como se intuye a través de su nombre, se trata de un símbolo de la temporada de Adviento que hace relación al primer período del año litúrgico cristiano, el cual consiste en un tiempo de preparación espiritual para la celebración del nacimiento de Cristo. Este suele tener una duración de 22 a 28 días y debe integrarse necesariamente por los cuatro domingos más próximos a la celebración de la Navidad.
Con el tiempo, los calendarios de adviento pasaron de ser una representación meramente simbólica, para hacerse tangibles a través del encendido de velas de colores por cada día celebrado. Una tradición que se remonta al siglo XIX en la Alemania protestante y que más adelante serviría como inspiración para los calendarios adviento actuales que se representan a través de cajas o canastas con sorpresas.
¿Cómo funciona un calendario de adviento?
Desde luego, tanto el paso de los años, la evolución de la fe católica y los cambios sociales, han marcado gran parte de la transformación de los calendarios de adviento. Es así como actualmente, siguiendo con la tradición, pero dándoles un giro mucho más actualizado, estos siguen funcionando a manera de conteo regresivo para la llegada de la Navidad, aunque complementándose con nuevas ideas.
Ahora, la mayoría vienen en formato de cajas, cofres o mini costales enumerados que guardan sorpresas que se van descubriendo cada día de Adviento. Y sí, aunque en un inicio solían estar elaborados especialmente para los niños, con el tiempo estos también han sido adoptados por los adultos, por lo que además de encontrar chocolates, bombones o mini juguetes, también se han popularizado con todo tipo de objetos vistosos.
¿Cómo hacer un calendario de adviento?
Si has quedado completamente convencida y estás dispuesta a revivir esta linda tradición, te sorprenderá lo fácil que es hacer tu propio calendario de adviento, dándole un toque personalizado de lo más cool.
Solo necesitas juntar 24 o 25 cajitas, tubos de papel, bolsas, frascos o lo que más te guste, enumerarlas y rellenarlas con diferentes sorpresas. Considera reunirlas en un mismo sitio, dentro de una repisa, caja o cofre y cada día ve sacando la que corresponde al calendario hasta llegar al día de Navidad. ¡Verás que es de lo más divertido!
Ahora sí, ya que ya sabes todo sobre los calendarios de adviento, ¡a juntar ideas para hacer el tuyo!
