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Noroko, la muñeca japonesa maldita hecha con partes humanas

La leyenda de esta aterradora muñeca es una historia japonesa que ha pasado de generación en generación.

Las muñecas siempre han sido objetos que despiertan la fascinación de chicos y grandes. Sin embargo, detrás de la inocente apariencia de algunas se esconde un horrible secreto, como es el caso de Noroko, una muñeca japonesa maldita.
 
En el pasado, Noroko fue un juguete inocente para los niños, pero su origen está manchado por una traición que desató guerras y muertes en el Japón antiguo.
 
Es por ese motivo y aprovechando que el Halloween está a la vuelta de la esquina que a continuación te contaremos la historia de Noroko, que seguramente te dará pesadillas.
 
La aterradora historia de Noroko, la muñeca japonesa maldita
Hace siglos, en el Japón existió un despiadado emperador, qué con sus terribles acciones poco a poco fue ganándose enemigos.
 
El odio hacia este hombre era tan grande que luego de un tiempo sus súbditos empezaron a planear la forma de matarlo.
 
Fue entonces cuando una noche el plan se puso en marcha. El emperador fue asesinado y su corazón arrancado y guardado para siempre en Noroko, una muñeca que debía servir como prisión para el alma del hombre.
 
El trabajo se cumplió y la muñeca fue tirada al mar, para que el tiempo y el agua la sepultaran para siempre, pero en lugar de que eso sucediera, el alma del emperador se fusionó con la muñeca, dotándola de vida y sed de venganza.
 
Desde entonces, Noroko se ha convertido en un símbolo del terror, pues se dice que si te encuentras con ella, debes prepararte para enfrentar la furia del emperador atrapado en su interior.
 
Noroko acecha en las sombras, entrando sigilosa en las casas durante la noche, desplazándose silenciosamente y esperando pacientemente a que sus víctimas caigan en un sueño profundo antes de revelar su verdadero rostro.
 
Cuando alguien se atreve a mirarla a los ojos, la muñeca despierta y su rostro sin expresión y retorcido por una ira antigua se convierten en lo último que ven sus víctimas.
 
Y aunque hasta el día de hoy se desconoce el paradero de la muñeca, la leyenda de Noroko es una historia famosa que ha sido contada de generación en generación para atemorizar a los niños traviesos.
 
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