Alianza firme entre Sheinbaum y Gallardo

Este domingo se realizó el registro de Claudia Sheinbaum como precandidata única de Morena a la Presidencia de la República, entre los invitados especiales estaba el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, está claro que entre ambos se ha tejido una relación política muy sólida rumbo a las elecciones del 2024.

El diagnóstico político que tiene Morena del estado de San Luis Potosí no es ningún secreto y está a la vista de todos: el movimiento que encabeza Ricardo Gallardo Cardona desde el Partido Verde Ecologista de México es la fuerza dominante, tiene una vocación social y cercanía con la gente, y coincidencias con los propósitos de la llamada Cuarta Transformación.

Las deficiencias y omisiones de Morena son cubiertas con creces por el gallardismo; ante la falta de estructura electoral y capacidad operativa está dispuesta y aceitada la del PVEM con el liderazgo de Ricardo Gallardo, cuyo arrastre barrió a la coalición de los partidos de derecha en la elección del 2021, y la votación fue muy desfavorable para Morena, fue un descalabro estrepitoso, carente de liderazgos y con una marcada incapacidad para atraer al electorado.

Las querellas internas, la disputa de espacios de poder, la persistencia de camarillas e intereses de grupo y personales, una escasa vida democrática interna ha propiciado la imposición de dirigencias y liderazgos, han obstaculizado el crecimiento de Morena en San Luis Potosí con una tradición de conservadurismo.

De este duro descalabro Morena aprendió la lección, porque la nueva portadora del bastón de mando no vacila y definió de manera clara y precisa una alianza política-electoral con el gobernador Ricardo Gallardo ya formalizada hace unas semanas durante una gira de Sheinbaum por la entidad.

Las estimaciones sobre el número de votos que se podrían obtener a través de la alianza del PVEM, Morena y PT, son muy altas, hay condiciones para ganar la mayoría de los distritos electorales locales y federales, los municipios y un porcentaje valioso de votos para la elección presidencial, para este escenario promisorio es fundamental la maquinaria gallardista.

Claudia Sheinbaum no le regatea reconocimiento al gobernador Gallardo y se ha dado una sinergia para lograr que se perfile un segundo sexenio de la llamada Cuarta Transformación, esta alianza es evidente que despierta encono entre los adversarios al advertir que serán vencidos en las urnas en el 2024.

La presencia del gobernador Ricardo Gallardo en el registro de Sheinbaum como precandidata presidencial, confirma lo antedicho: el gallardismo tendrá un papel relevante el próximo año, cosechar los votos necesarios para atajar el regreso de los conservadores al poder, para garantizar la mayoría calificada en las cámaras de Diputados y Senadores.

Por cierto, para el Senado se da como un hecho que la presidenta del DIF estatal, Ruth González Silva, será candidata al reunir todos los requisitos y sobre todo por tener una presencia relevante en todo el estado y sensibilidad para apoyar a los sectores menos favorecidos.