Cuando piensas en los mejores lugares para viajar en diciembre, es posible que te sientas tentado a ver el mes a través del prisma de la Navidad, lo cual es comprensible, dada la abundancia de ciudades que se esfuerzan al máximo para las festividades. Y aunque siempre estamos dispuestos a disfrutar de un mercado navideño europeo o de una deslumbrante exhibición de luces, hay muchas razones para viajar este mes fuera de la época navideña.
Ya sea que andes en la búsqueda anticipada de increíbles lugares para esquiar o quieras escapar de la melancolía invernal en el Caribe, aquí te presentamos los 12 mejores lugares para viajar en diciembre.
Miami, Florida
Muchas personas se dirigen a Miami a principios de diciembre para Art Basel Miami Beach, la deslumbrante confabulación de cuatro días (programada para el 8 al 10 de diciembre de 2023) que atrae tanto a los mundos de la moda como al del arte. La lista de artistas incluye a 24 participantes por primera vez (de un total de 277) provenientes de lugares que van desde Nueva York hasta Seúl, además de varias conferencias invitadas y experiencias gastronómicas.
Por supuesto, hay muchas razones para visitar Miami más allá de los momentos finales de Art Basel, principalmente una próspera escena de hoteles de alta gama. El St. Regis Bal Harbour Resort es en sí mismo un destino artístico, con paredes de metal geométricas y enormes esculturas colgadas del techo del vestíbulo. Otras comodidades lujosas, como mayordomos privados y un bar de hamburguesas gourmet, hacen de este el lugar perfecto para celebrar una ocasión especial. Para una estancia junto a la playa (pero igual de lujosa), dirígete al Ritz-Carlton Key Biscayne, ubicado a unos 15 kilómetros de South Beach. Sus vistas al océano y su restaurante con una amplia selección de tequilas son ideales en cualquier época del año, pero este diciembre ofrece una serie de ventajas temáticas navideñas, como ponche de huevo en el vestíbulo y pedicuras de menta en el spa.
Parque Nacional De Yellowstone
Si no has visitado Yellowstone en pleno invierno, te estás perdiendo una de las experiencias de viaje más increíbles que existen. No solo escaparás de las multitudes típicas del verano que hacen casi imposible ver la vida silvestre y lugares populares como Old Faithful —a partir de diciembre, el parque está cerrado a los automóviles y solo se permiten vehículos de nieve y motos de nieve—, sino que la relativa tranquilidad y el frío helado del invierno hacen que el parque nacional más antiguo de Estados Unidos se sienta aún más como un mundo mágico. Solo imagina: bisontes adormilados con barbas cubiertas de nieve, brillantes piscinas azules en medio de un manto blanco y pasarelas cubiertas de vapor de las características termales circundantes.
Solo hay un par de alojamientos dentro del parque abiertos en invierno, pero afortunadamente son increíblemente acogedores y convenientes. Situado en el corazón de Yellowstone, el Old Faithful Snow Lodge recibirá una dosis adicional de magia navideña este diciembre, con árboles decorados en todo el hotel, dulces navideños en las habitaciones, estaciones para decorar galletas y visitas de Santa. Los huéspedes también pueden reservar varias excursiones al aire libre desde el alojamiento, que van desde recorridos guiados en raquetas de nieve hasta safaris fotográficos de vida silvestre.
Whistler, Canadá
Si estás buscando desesperadamente lugares para esquiar, no hay mucho mejor que la zona de esquí más grande de América del Norte. Con 3 mil 306 hectáreas de terreno esquiable y pistas que van desde fáciles hasta extremadamente difíciles, las dos montañas gemelas de Whistler Blackcomb realmente tienen algo para cada entusiasta de los deportes invernales. Tanto el remonte Big Red Express como la góndola Creekside fueron renovados hace unos años para transportar a más personas, lo que significa que las montañas se sentirán mucho menos congestionadas y los visitantes podrán disfrutar de aún más descensos en nieve polvo.
Una vez que guardes tus bastones al final del día, disfruta de toda la gloria del après-ski en Whistler Village. Aquí encontrarás la mayor concentración de bares y restaurantes de la zona del complejo, que van desde el animado restaurante de mariscos de alta gama Wild Blue hasta el relajado pero elegante Braidwood Tavern. En cuanto a hoteles, el Fairmont Chateau Whistler parece (y se siente) como un auténtico castillo encantado, ubicado en la base de Blackcomb.
Las Azores, Portugal
Este archipiélago que alguna vez pasó desapercibido en medio del Atlántico es perfecto para los aventureros, con opciones como avistamiento de ballenas, senderismo en calderas y rapel en cascadas —la Isla Terceira alberga el único volcán en el mundo donde los visitantes pueden explorar una chimenea y una cámara de magma secundaria, una al lado de la otra—. Y aunque el turismo ha alcanzado a las Azores en la última década, visitar este lugar durante el invierno te brinda una visión de cómo solía ser el Edén.
Diciembre no es frío aquí, a pesar de la ubicación atlántica del archipiélago, ya que la corriente del Golfo mantiene las temperaturas sorprendentemente templadas durante todo el año, rara vez bajando por debajo de unos 60 grados o así. La Isla de Santa María generalmente tiene el clima más cálido, aunque nadar puede estar descartado en invierno. Si deseas pasar tiempo en el agua, visita en su lugar una fuente termal geotérmicamente calentada.
Salzburgo, Austria
Alemania tiende a acaparar la atención cuando se trata de mercados navideños (con razón), pero la vecina Austria puede ser igual de festiva y encantadora, especialmente en la ciudad de Salzburgo. No es sorprendente que la Ciudad Vieja, catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y que sirvió de escenario para La Novicia Rebelde, también llene su famoso Christkindlmarkt [mercado navideño] de canciones.
Con raíces que se remontan al siglo XV, los coros y la música de viento tradicional del mercado son tan importantes en las festividades como el vino caliente y los puestos que venden adornos y calcetines mullidos. Tampoco nos quejamos de los bauernkrapfen [pasteles fritos]. El mercado suma puntos adicionales por estar a solo unos pasos del Hotel Goldener Hirsch, uno de los hoteles de lujo más antiguos del mundo y un lugar perfecto para calentarse entre las sesiones de compras al aire libre.
