Los panteones y mausoleos del mundo nos cuentan historias surreales, llenas de aventuras, desamores y alguna que otra tragedia, que no conocerás en ningún otro sitio. Cada uno de estos lugares guarda innumerables sorpresas para ti, desde tumbas tan longevas que sus epitafios son indistinguibles, hasta los restos de las personalidades que ahí yacen y que atraen constantes visitas; además, algunos poseen una inmensa cantidad de senderos escabrosos dignos de los filmes de terror más puro.
Una vez más, la arquitectura será nuestra guía entre estos panteones y mausoleos del mundo, cuya fama ha atravesado el tiempo y las naciones, y hoy, se elevan como testigos fúnebres en la historia de humanidad. Si te atreves, acompáñanos.
Cementerio y Parque de Ohlsdorf
Hamburgo, Alemania
Calentamos los motores de este recorrido por los panteones y mausoleos del mundo con un sitio que, más que tenebroso, es una joya paisajística sacada de una historia de Jane Austen. Hablamos del Cementerio y Parque de Ohlsdorf, en Hamburgo, cuya extensión supera las 380 hectáreas. Seguramente te preguntarás qué hace tan especial a este cementerio, y la respuesta está en su belleza; te aseguramos que el sitio es hermoso e incomparable, sobre todo si tenemos en cuenta que aquí reposan cuerpos sin vida. Sí, sabemos que hay cierta ironía en nuestras palabras, pero tal ironía fue el concepto de diseño del arquitecto alemán Wilhelm Cordes, quien lo concibió con la premisa de que, si él pasara la eternidad entre las tumbas de un cementerio, al menos tendría que ser en el lugar más paradisiaco.
Así, el Cementerio y Parque de Ohlsdorf cuenta con más de 800 esculturas fúnebres, 36 mil árboles y arbustos, más de 100 especies de aves, además de ciervos, zorros, conejos, ardillas, erizos, entre otros. La visión romantizada que tuvo el arquitecto se expresó en líneas curvas, cambios de la vegetación de la mano de las estaciones, recorridos acompañados de colores, olores y el piar de las aves descansando en los 15 estanques. Aparte del uso del paisaje como medio para honrar a los muertos, encontrarás los restos del famoso periodista y escritor alemán Kurt Wilhelm Marek, así como un monumento a las mujeres que llevaron cultura y arte a la ciudad, conocido como “El Jardín de las Mujeres”, por su traducción del alemán “Der Garten der Fraven”.
Cementerio Père Lachaise
París, Francia
De Alemania viajamos hasta Francia para conocer el que, para muchos, es el panteón moderno más famoso del mundo. Hablamos, por supuesto, del Cementerio Père Lachaise, inaugurado el 21 de mayo de 1804 a las afueras de la ciudad parisina. La historia del lugar es, cuanto menos, atrapante, ya que fue producto de una ley que prohibió tener panteones dentro de París, promulgada en el siglo XVIII. Por lo tanto, éstos fueron traslados a los límites de la ciudad, como fue el caso del Père Lachaise. Sin embargo, su afluencia estuvo reducida por varios años, ya que los parisinos no confiaban en dejar a sus seres queridos tan lejos de sus residencias. No fue hasta que las cenizas de los amantes obligados a separarse, Abelardo y Eloísa, fueron llevadas al cementerio, que comenzó a recibir a los fallecidos de la ciudad. El reconocido escritor y dramaturgo Jean-Baptiste Poquelin, o simplemente Molière, junto al creador de la fábula de “La Cigarra y la Hormiga”, La Fontaine, también fueron de los primeros en encontrar el descanso eterno entre las tumbas y los mausoleos del Père Lachaise.
Pero estas personalidades no son los únicos que yacen en el lugar, si eres amante de la literatura victoriana, debes saber que Oscar Wilde también fue sepultado allí, en un mausoleo cuya escultura fue nombrada como el “Flying Demon Angel”, que por años fue marcada con los labios pintados de sus fanáticos; se dice que tal tradición se debía a que Wilde fue arrestado por un beso. Lamentamos informarte que ya es imposible seguir con esos actos, pues tras la restauración de la escultura, se colocó una pared traslúcida para protegerla. Además de Oscar Wilde, también puedes encontrar las tumbas de Jim Morrison, Chopin, Édith Piaf, Maria Callas, Eugène Delacroix, entre muchos más. Por todo el mundo, hay panteones inspirados en este lúgubre recinto.
Panteón de Agripa
Roma, Italia
Para conocer el Panteón de Agripa no solo volaremos hasta Roma, sino que viajaremos en el tiempo hasta el 126 d.C. A diferencia de los ejemplos que vimos anteriormente, este panteón fue concebido como un espacio cerrado y no al aire libre, además de ser el más longevo de todos con casi 1,900 años de antigüedad. Si el nombre todavía no te suena, probablemente lo reconozcas como el Panteón de Roma, el mismo que los romanos construyeron y que se considera el edificio de arquitectura clásica mejor conservado de todos. Se le acuña el término “de Agripa” por estar erigido sobre los restos de su homónimo que fue reducido a cenizas por un incendio en el 80 d.C.
Como vestigio de la arquitectura romana, es digno de estudio, pues su frontón, al estilo griego, se encuentra perfectamente conservado, gracias a que el recinto fue donado al Papa Bonifacio IV, y la iglesia lo mantuvo en mantenimiento por cuatro siglos. Dicho frontón está sostenido por 16 columnas de granito de 14 metros de altura y están diseñadas bajo la orden corintia. El interior está coronado por una increíble cúpula, y una serie de nichos circundan la planta. Aunque hoy en día es un museo, aún descansan ahí los restos de los reyes Vittorio Emanuele II y Umberto I, así como los políticos Agostino Depretis y Francesco Crispi.
Cementerio La Recoleta
Buenos Aires, Argentina
Para nuestra siguiente parada, dejaremos el continente europeo y aterrizaremos en tierras latinas, para visitar el Cementerio La Recoleta, en Argentina. De entre sus cinco hectáreas de extensión existen más de 4,800 mausoleos, de los cuales, 90 están catalogados como Patrimonio de la Humanidad. El panteón estuvo destinado, a lo largo de todo el siglo XIX, a las familias más distinguidas de la ciudad, pues la localidad La Recoleta, de la que recibe el nombre, es conocida por su posición acaudalada.
La influencia francesa y clásica es el principal rasgo de La Recoleta, pues la mayoría de los mausoleos están diseñados bajo los parámetros estéticos del gótico, el griego y el romano. Por lo tanto, es normal observar frontones, columnas adosadas con algún motivo canónico, rosetones y arcos ojivales. Te preguntarás quiénes descansan en este prestigioso cementerio; la famosa Evita, Eva Perón, es una de afortunadas de yacer entre tanta elegancia, así como Carlos Saavedra Lamas, Nobel de la Paz, junto al escritor Eugenio Cambaceres y el boxeador argentino Luis Ángel Firpo.
Cementerio Okunoin
Wakayama, Japón
De América Latina, nos vamos hasta la isla nipona. En Japón se encuentra uno de los cementerios más antiguos del mundo, lleno de magia y misticismo oriental, el Cementerio Okunoin. La naturaleza es el telón de fondo para las 200 mil tumbas y 100 templos que discurren por todo el monte Koya. ¿Recuerdas que mencionamos la palabra misticismo? Lo hicimos porque se cree que el cementerio está protegido por un bosque milenario; además cuenta con el famoso Torodo Hall, que es un sendero iluminado por más de diez mil luminarias en piedra que, según se cuenta, jamás se han apagado.
Este recinto de descanso eterno destaca de los miles de panteones y mausoleos del mundo porque allí yace K?b?-Daishi, quien fue el fundador del budismo Shingon; las leyendas cuentan que el monje lidera las meditaciones de todos los fallecidos que fueron sepultados en Okunoin.
Cementerio Holandés
Gulam Falia, India
Para cerrar con broche de oro este viaje, recorreremos el Cementerio Holandés, en la India. El último puesto es el que más misterio guarda, pues poco se conoce del lugar, además de que el Holandés, junto al Armenio, disputaron por el puesto del panteón más grande y bello.
Está ubicado en la región Gulam Falia, y es conocido por lo alto y majestuoso de sus mausoleos; las 94 tumbas del cementerio son más discretas. Aquí encontrarás en su descanso eterno a los hermanos Oxenden, dueños de la fábrica holandesa que funcionó en el poblado indio, y al ex presidente de Bombay, Gerald Aungier.
Y así concluimos nuestro viaje alrededor de los panteones y mausoleos del mundo, algunos tenebrosos, otros más contemplativos, pero todos son grandes representantes de la arquitectura fúnebre que sobrevive a los siglos.
