Soluciones desesperadas. Carranza, a litigios

Como corredor comercial, en su tramo más tradicional, Carranza, hace varios años que dejó de serlo: no hay tiendas icónicas, ni mucho menos de marcas que le ayuden a dar mayor valor a esa avenida, donde poco a poco la actividad comercial se extingue en forma inexorable.

En alguna época, ese corredor era un referente de restaurantes, con una afluencia constante y variedad, también de la diversidad comercial que conectaba negocios y cadenas que provenían del modelo económico de los 70's, con lo que se avizoraba como un prometedor paseo cultural y de servicios.

Tampoco ayuda mucho que Carranza esté en una forma muy marcada, segmentada en cuatro bloques que en su conjunto, la estimación es pueden impulsar una derrama de hasta mil millones de pesos al año.

El que abarca la zona del Centro Histórico, con su corredor gastronómico y comercial.

El tradicional de Uresti hasta el Jardín de Tequis, convertido en una zona económica muy deprimida.

El que prosigue desde ahí hasta las inmediaciones del museo Francisco Cossío Casa de la Cultura; y un último identificado por los centros educativos que le conceden movimiento a la actividad comercial, bancaria y los tres restaurantes, instalados en esa zona.

Es un estudio de caso.

Tres de las zonas se mantienen equilibradas, tienen una actividad constante, es común la apertura de nuevos establecimientos.

La crisis inserta en Carranza  sector tradicional, lo explican con frecuencia al severo impacto de la pandemia que siniestró todas las actividades económicas, y muy en concreto el desarrollo de una ciclovía que le restó movilidad.

Correcto o no su diseño, cuando se creó esa vía para ciclistas, no hubo ninguna estrategia complementaria que ayudara a mantener activa la zona. Sin grandes cadenas o marcas emblemáticas, se perdió competitividad comercial.

No hubo tampoco generación de otro tipo de atractivos, como se ven en otros paseos comerciales con esculturas monumentales, iluminación escénica o hasta espectáculos musicales o artísticos.

Ninguna de ellas.

En otras partes del mundo las avenidas comerciales, son muy valoradas en todos sus cuidados, porque representan además la economía del turismo.

Carranza tradicional, por el contrario, agoniza.

Un plan de rescate propuesto parece que brotó de la verdadera desesperación, ante la pasividad e inactividad, o hasta tortuguismo.

Es otra vez los socorridos recursos jurídicos, utilizados ahora con distintos propósitos.
En tribunales combaten un grupo de comerciantes y empresarios, la infraestructura de la ciclovía, lo que va meter de lleno en el caso al ayuntamiento capitalino.

El recurso está metido desde hace varios meses, en él argumentan que esa infraestructura, con el tiempo, ha ocasionado un daño económico severo, y propiciado otros efectos, como es el deterioro urbano y de la seguridad.

En caso que proceda este recurso de amparo, es para efectos que el espacio quede restituido a como lo estuvo antes, es decir, sin ciclovía.

Sí, se trata de un acto consumado que data de hace varios años, pero no quita que sea una posibilidad.... más otros argumentos esgrimidos y que atañen directo al municipio.

La desesperación comprensible, una cada vez mayor cantidad de cortinas cerradas, detonó encontrar a cómo dé lugar, maneras para revertir la catástrofe.

Y si procede el recurso, no hay de otra, algo van a tener que hacer con la intocada ciclovía.

VERTICALIDAD, TENDENCIA INNEGABLE
El Infonavit generó una convocatoria no hace mucho, para que 80 municipios identificados en el país, como los que pueden maximizar el fenómeno del nearshoring, puedan tener una versión actualizada de sus planes de ordenamiento y desarrollo urbano, financiados por el instituto.

En SLP, en forma indiscutible, eligieron a Villa de Reyes, el municipio con una mayor vocación industrial.
La actualización está en proceso, pero con una reserva territorial urbanizable reducida, va plantearse un agresivo proyecto de vivienda vertical que transformará la fisonomía de esa ciudad que apenas hace poco más de 10 años, era visto como un poblado más de los muchos que hay en el país.

En el Infonavit han tenido la capacidad sí poder ver lo que viene a futuro, a un horizonte de cinco años, y que con el crecimiento industrial, exigirá más soluciones de vivienda.

En ese municipio identifican a 16 mil trabajadores, en condiciones de ejercer su crédito para adquisición de vivienda, pero no la hay, la actualización de ese plan que no va más allá de un par de meses, va acelerar su generación.
Ya hay un proyecto de vivienda vertical en proceso,  con ecotecnologías y sustentable que puede ser un modelo, para los años subsecuentes.

La tendencia es hacia la verticalidad, acelerada por la instalación de mas empresas.
En noviembre dos comienzan con etapas de reclutamiento, y entre ambas, se harán contrataciones hasta de mil 500 trabajadores.
COMODIDADES

Una lección de la pandemia del COVID, entendida por la industria, consistió en procurar el cuidado del talento humano, la fuerza productiva.

El concepto de comodidad laboral cada vez es más vigente, y se plantean líneas de acción, más creativas y hasta jocosas, pero algún efecto habrán observado.

Una muy popular marca de tiendas de conveniencia de origen norteño, en la Zona Industrial, está considerada en un proyecto, para que abra un punto o establecimiento, en cada una de las empresas instaladas, y así que los trabajadores, accedan a una mayor variedad de productos, y no sólo los disponibles en el comedor, o máquinas.

También para que no solo tengan a su alcance, las chucherías y chunches que hay en la calle.

NUEVOS DESARROLLOS VIVIENDEROS
Con el impasse que se puso a la conversión de Pozos en municipio, en inmediato se convirtió la delegación de Pozos, otra vez, en una opción para desarrollar nueva vivienda.

Cierto, es un área que está inmersa en conflictos jurídicos ejidales, con relativa frecuencia.
Eso no impidió que empresarios locales, promuevan la construcción de dos desarrollos segmentos medio, y medio residencial.

@LA_BRUJULA_O
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