Plano Informativo | 17/09/2023 | 00:26
Entre las cosas bonitas que nos dejó El San Luis que se fue, están los barrios fundacionales, y El Saucito fue uno de los más bravos. Antiguamente se llamaba “Las Encinillas”, y en ese lugar los franciscanos del convento de Tlaxcala levantaron una ermita alrededor de 1820, en ese entonces era un lugar completamente perdido entre los mezquites y pirules.
Sin embargo, con la aparición del Señor del Saucito o El Señor de Burgos, este santuario se hizo famoso en todo México por la cantidad de milagros que se atribuyen a esta imagen tallada a partir del tronco de un árbol de sauce.
La devoción a la imagen de Nuestro Señor de Burgos dio origen a dos inmuebles que contribuyen a darle identidad al norte de la ciudad, uno es pequeño y modesto, construido en 1826, y el otro se inició en 1880 y fue concluido en 1955.
El templo está hecho de adobe, piedra y revestimiento de cantera rosa. Esta construcción fue declarada Monumento Histórico Nacional el 23 de febrero de 2018 por el INAH.
Fotos: El Arcón de los Abuelos