Después de que has hecho todo lo necesario para que el bebé se duerma, estás desesperada y no sabes qué hacer. Te montas en el coche, das una vuelta y ocurre el milagro: se ha dormido. No lo puedes creer. Aunque estás feliz porque lo lograste, te preguntas si es recomendable que duerma en la silla del coche.
Por supuesto, llegas a casa y después de que por fin se durmió, ni remotamente se te ocurre la idea de sacarlo de la silla del coche. Prefieres que siga durmiendo ahí, antes de despertarlo de nuevo. La pregunta aparece de nuevo a tu cabeza: ¿es bueno dejar que duerma en la silla del coche?
Si esta situación te resulta familiar, es conveniente que leas esta información.
¿Por qué los bebés se duermen cuando van en coche?
La cuna y el ambiente de extrema quietud que suelen tener los cuartos de los bebés no se parecen en nada a lo que vivieron durante los 9 meses de gestación. En el útero materno, el bebé estaba sostenido, apretado, durante las 24 horas del día.
El bebé oye el corazón, la digestión y la respiración de su madre. Asimismo, escucha su voz, y hasta le ponen música con unos audífonos sobre el vientre. La mamá camina, se mueve, sube y baja escaleras, hace ejercicios… Apenas se detiene cuando se va a dormir, pues se queda más quieta, pero los sonidos no cesan.
En medio de ese tenue pero continuo torbellino de sonidos y movimientos, el bebé se duerme. Por eso es fácil imaginar por qué, una vez que llega a una cuna enorme en un cuarto solitario y silencioso, es muy difícil conciliar el sueño.
Sin embargo, cuando se montan en el coche, la vibración y las revoluciones del motor logran lo que parece imposible: el bebé se duerme. También es fácil imaginar las razones por las que esto ocurre; el arrullo del auto remite al bebé a sus días en el útero materno.
¿Qué pasa con las sillas del coche?
Las sillas para bebés o portabebés son un instrumento de seguridad básico para trasladar a tu bebé en el auto. En muchos países, incluso son exigidas por las leyes de tránsito vigentes.
Es una medida básica de seguridad para tu hijo ante una eventual colisión o choque. Así no estés manejando o vayas al lado del bebé. Siempre es preferible que esté en la silla del coche que en tus brazos.
En un choque contra otro vehículo o algo que se encuentre en la vía, el bebé puede salir expulsado del vehículo ante la energía del impacto si lo llevas en tus brazos. La silla del coche puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. El problema aparece cuando se utiliza una silla más grande a la apropiada para el tiempo de vida del bebé recién nacido.
¿Hay que evitar que se duerma en la silla del coche?
Es inevitable, el bebé se va a dormir en el auto. Tampoco puedes ir impidiendo que se duerma. Lo que debes hacer para resguardar su seguridad, es vigilar su sueño y corregir las posturas corporales. Tu bebé es muy frágil, y como aún no controla su cuerpo, las posiciones cambian mientras va en el auto.
Si vas acompañada, lo ideal es que alguien vaya atrás al lado del bebé y esté atento a sus posturas. Evita dejar solo al bebé en el asiento trasero. Si vas sola con tu bebé, evita hacer viajes muy largos.
Las situaciones de riesgo que hay que atender ante la posibilidad de que se duerma en la silla del coche son:
Como el bebé no tiene control de su cabeza, sobre todo en sus primeras semanas de vida, el movimiento del coche hace que la cabeza caiga hacia adelante y se bloqueen las vías respiratorias produciendo asfixia.
Cuando se sienta a un bebé en una silla, hay que vigilar la posición y colocar bien los arneses. De lo contrario, su cuerpo puede flexionarse demasiado sobre sí mismo y comprimir el tórax y el abdomen. Si además el bebé se duerme y su cabeza cae hacia adelante, las dificultades para respirar son mayores.
El nivel de saturación de oxígeno baja cuando el bebé está sentado en la silla, sobre todo cuando aún no controla su cuerpo. Por esta razón es recomendable que el bebé no esté mucho tiempo sentado, ya que todavía no tiene la fortaleza para sostenerse por sí mismo.
En invierno, hay que evitar que al sentar al bebé lleve un abrigo muy grueso. Las correas de seguridad no lo sujetarán bien por el grosor de la ropa, con lo cual puede salir disparado en una colisión.