El cineasta Ricardo Arnaiz recrea la historia de los Niños Héroes en su nueva película
AristeguiNoticias / Foto: FB | 08/09/2023 | 19:37
El 13 de septiembre de 1847, un grupo de cadetes enfrentó al ejército estadounidense. Los protagonistas de aquel episodio son conocidos como los Niños Héroes y su gesta se ha convertido en un episodio mitificado y continuamente situado. Con el fin de promover el interés por lo que ocurrió realmente aquel día, el realizador mexicano Ricardo Arnaiz filmó Héroes, una película que pone el acento en el aspecto humano de aquellos menores y que ya se puede ver en 200 salas de cine a nivel nacional.
Arnaiz, quien hasta ahora solo había hecho filmes de animación como La leyenda de la Nahuala, reconoce que su intención con esta película no era hacer un documento netamente histórico, sino mostrar la importancia de la amistad, la solidaridad y la lealtad, entre los jóvenes.
¿De dónde viene tu interés por retomar el episodio de los Niños Héroes?
Quería hacer una película de miedo y acción viva, pero no tenía mucha idea de la historia que quería contar. Recordé una película llamada Soldados de juguete, de finales de los ochenta, trata de unos chavitos que están en una escuela y de sus ganas de defenderse entre sí cuando llegan unos terroristas y por esos días volví a ver Rojo amanecer, una de mis películas mexicanas favoritas y que narra los trágicos eventos del 2 de octubre de 1968, pero sin mostrar nada de la batalla, la historia se centra en el horror de lo que vive una familia. Mi amigo Carlos Pimentel me propuso hacer una película de animación de los Niños Héroes, pero le respondí que mejor la hiciéramos con acción viva y concentrándonos en el especto humano de los jovencitos ante la amenaza de un ejército más poderoso y experimentado.
Seguramente es más sencillo solucionar las recreaciones históricas desde la animación que con la acción viva.
Sin duda es más fácil controlar el medio ambiente o la iluminación con un dibujo, no obstante Puebla nos permitió gracias a que cuenta con unos lugares históricos que datan de esa época, recrear El Colegio Militar y todo lo que necesitábamos para hacer más creíble la historia. Un reto fue emular el Castillo de Chapultepec, pero nos sentimos muy afortunados porque encontramos los escenarios idóneos.
El episodio de los Niños Héroes está muy mitificado y distorsionado. ¿Qué tipo de libertades te tomaste?
No podemos decir que Héroes es un documento histórico o documental, es una ficción realizada con respeto y el cariño. Por supuesto tuvimos acceso a actas de nacimiento y defunción, documentos que avalaran que lo que contamos es real. Tuvimos asesoría del capitán Martín Martínez, uno de los principales estudiosos de esta batalla. No sabemos si lo que contamos sucedió exactamente así la madrugada del 13 de septiembre de 1847, pero en nuestra historia y con nuestros personajes tiene muchísimo sentido. Es muy fácil decir que no fueron niños ni héroes, pero les decían así porque entonces a partir de los 21 años se les consideraba adultos. Quiero pensar que gracias esta producción habrá gente interesada en profundizar en el conocimiento de este pasaje.
¿Por qué no contar la película con perspectiva histórica y en cambio sí centrarse en sentimientos como la amistad?
Es verdad que la película habla sobre la amistad y cosas muy mexicanas que nos permiten identificarnos con los personajes. Te pongo un ejemplo, se decía que los Niños Héroes se hablaban de usted entre ellos, si respetábamos eso se iba a sentir raro en las audiencias, por eso lo adaptamos al presente. No obstante, los datos y elementos históricos sí están muy cercanos a lo que pudo haber pasado. La lectura que proponemos sobre la bandera y Juan Escutia está más cercana al compañerismo y la lealtad.
Tras la película, ¿quiénes son para ti los Niños Héroes?
Son unos chavos como cualquier otro, en cualquier época de México, que reacciona con solidaridad ante las adversidades. Crearon una hermandad, identidad y unión como muy pocas, dentro de El Colegio Militar. Sea en el siglo XIX o el XXI, los mexicanos no nos dejamos tan fácil.
¿Por qué se hace poco cine histórico en México?
Es difícil porque no es sencillo recrear ambientes, además el cine histórico requiere de personajes más humanos y contemporáneos; es un género que necesita hablar más de aspectos íntimos e ir más allá de las motivaciones de los personajes.
¿Ya te despediste del cine de animación?
Todavía tengo historias por contar en animación porque no se pueden contar en acción viva, pero también estoy trabajando en dos guiones con actores reales. Cada formato tiene características y virtudes propias, de modo que estaré en ambos territorios.