San Luis Potosí, SLP.- Apenas unas semanas después que concluyó el periodo vacacional de verano, la cascada de Tamul en el municipio huasteco de Aquismón quedó completamente seca.
El atractivo natural dejó de verter la columna de agua de más de 90 metros de altura, derivado de la intensa sequía y el prolongado estiaje que afecta esa zona del territorio potosino.
No es el único cuerpo de agua de la zona con el mismo problema de sequía, también se presenta el mismo fenómeno en el río Valles.
Desde hace varias semanas independientemente de las actividades agropecuarias aledañas, el río Santa María, desde el cual escurre la cascada de Tamul, registró una severa disminución en su caudal.
El municipio de Aquismón clasificado como Pueblo Mágico, es uno que durante la temporada vacacional, registró una mayor afluencia turística, entre 2 mil y 3 mil visitantes cada fin de semana, en promedio, atraídos por ese atractivo natural, al que se llega tras un recorrido en barcazas de 45 minutos.
En el año, es la tercera ocasión que la cascada pierde su caída de agua.