Los autos del Rey Carlos III representan lo último en producción británica de posguerra. Dentro de la colección se encuentran todas las marcas británicas más famosas del mundo del automovilismo —Aston Martin, Bentley, Jaguar y Rolls-Royce— y sólo hablamos de los autos oficiales propiedad de la monarquía. En este sentido, cabe destacar que muchos de los coches del actual monarca de Inglaterra pertenecían hasta hace poco a su madre, la Reina Isabel II. Son modelos de absoluta belleza y clase, algunos de los cuales han hecho historia en la automoción, y no sólo en la historia de los automóviles del otro lado del Canal de la Mancha. Todos ellos se encuentran en los Royal Mews del Palacio de Buckingham.
En cuanto a las ocasiones oficiales, la corona británica es obviamente muy patriótica: la Reina Isabel II solía aparecer en público sólo en autos fabricados en Inglaterra y seguramente el Rey Carlos III hará lo mismo tras su coronación. Después de todo, para los desplazamientos oficiales el Palacio de Buckingham dispone de ocho limusinas, dos Bentley, tres Rolls Royce y tres de Daimler, todos ellos pintados con la librea oficial, que es de color rojo púrpura y tiene la peculiaridad de no llevar matrícula. A continuación, hemos recopilado los autos “oficiales” del Rey Carlos III.
Aston Martin DB6 Volante Serie II (1969)
El Aston Martin DB6 Volante fue regalado a un joven Rey Carlos III por la Reina Isabel II con motivo de su cumpleaños número 21. Era muy potente para su época, con un motor de 4 litros y 6 cilindros y 282 CV. Por eso, el actual monarca recibió clases de conducción deportiva del bicampeón del mundo de la F1 Graham Hill. Además, Carlos hizo instalar un falso botón rojo de “eyección” al estilo James Bond, para poder jugar bromas a sus pasajeros.
Aston Martin V8 Vantage Volante (1989)
El Aston Martin V8 Vantage Volante fue regalado al Rey Carlos III —quien será coronado oficialmente este 6 de mayo— por el emir de Bahréin en 1987. Lo quiso pintado en Balmoral Green pero sin el típico kit de carrocería Vantage de alerones y faldones, por lo que este modelo pasó a conocerse como Prince of Wales Spec y se calcula que se fabricaron 26 más con esta especificación, considerada ahora la más deseable de los distintos modelos de la familia Aston Martin V8.
Limusina de Estado Bentley
Las dos limusinas de Estado Bentley se construyeron a partir del antiguo Arnage. Miden 6.22 metros de largo, casi un metro más que un Mulsanne estándar. Las puertas traseras tienen bisagras en la parte posterior para permitir que el invitado se ponga de pie antes de salir, mientras que los asientos traseros son de tela Hield Lambswool Sateen y el resto del interior es de cuero Connolly en color gris claro.
Jaguar Daimler V8
Entregado al Palacio de Buckingham en 2001, el Jaguar Daimler V8 Super LWB fue utilizado durante tres años y conducido a menudo por la propia Reina Isabel II, en viajes dentro de Gran Bretaña. Las modificaciones incluyen un reposabrazos con un soporte deslizante diseñado para guardar bolsas, y las salidas de aire se han modificado para que el aire no afluya directamente en el rostro de los pasajeros.
Rolls-Royce Phantom VI
El Rolls-Royce Phantom VI ha servido a la Familia Real durante varias décadas. Originalmente, la Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Automóviles —asociación de fabricantes británicos de automóviles— se lo regaló a la reina Isabel II con motivo de las celebraciones del 25 aniversario de su reinado (el Jubileo de Plata de 1977).
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