La impaciencia termina en impertinencia

aNos toca vivir un mundo raro, cada vez más complicado, los hijos se acuerdan de sus padres cada que requieren de dinero, una tableta electrónica, un celular nuevo, hasta un préstamo que nunca vemos de regreso para invitar a la novia al “antro” o ya por lo menos un helado. Las familias parecen estar en competencia, quien tiene el carro más caro, el club social al que se pertenece, la botella de vino que se toman ¡ah eso sí! el lugar cuenta mucho, el corte de carne gourmet, la botana de autor delicia al paladar de los escamoles, aun cunando desconozcan de dónde vienen, lo importante es el precio, pero menos comeremos los cacahuates cantineros, eso es para borrachos de cantina del mercado. Lo “nice” es la moda siempre y cuando te acomode, somos tan impacientes que aceleramos la vida.

Algunos les llaman mala vibra cuando una persona le sucede una desgracia familiar, algún robo a su casa, la pérdida del trabajo, podríamos buscar explicaciones a la suerte que no está de nuestro lado, más bien, dicen algunos, son las “vibraciones malignas” o la “herencia maldita” en muchos de los casos las provocamos nosotros mismos en la desesperación de sobresalir en sociedad, olvidándonos del cuidado que debemos tener hacia nosotros mismos; querer abarcar tanto socialmente, nos hace vulnerables, es más, en ocasiones ya no se envidia la riqueza material, sino la estabilidad de la otra apersona, su vida, sea soltero, divorciado, viuda o casada, si la ven contenta feliz con su vida, la convierten en el blanco de sus envidias, son personas impacientes e impertinentes, no distinguen el lugar ni circunstancias, ni personas o grupos, solo hablan para ofender, vuelve hablar y continúan ofendiendo.

“Lo que más se parece a la enemistad es la impertinencia” Luis Bottach, el ser pertinente es lo cauto, la impertinencia casi siempre termina siendo aborrecible.

Personas que se ocupan de los demás, son capaces de no hacer por nada por ellos mismos, quieren ir a limpiar la casa ajena y no se les ocurre limpiar su casa, o como el campesino que siempre a temprana hora visita su parcela, sueña con trabajarla y verla producir, pero sin prefieren por necesidad, comodidad tal vez impaciencia, buscar la tierra de otro para trabajarla.

Seamos cautos y pacientes, la impertinencia es aliada de impaciencia.

Después de la independencia mexicana, se marcó como un imaginario de impaciencia, imprudencia e impertinencia de los gobernantes, cuando menos lo acordamos ya teníamos un imperio, después una dictadura que acabo con la mitad del territorio, la republica de Juárez luchando contra el impertinente imperio de Maximiliano. Don Porfirio un imprudente

dictador de 30 años en el poder, que ocasiono al final de 10 años de lucha, un millón de muertos con la revolución mexicana y después…larga vida al rey de la revolución, con los impacientes, imprudentes gobernantes del PRI, con algunos caminos de gloria, también la aborrecible carga del costal llenas de impertinencias corruptas y mal vistas por todo mexicano honesto, es un lastre.

La espiral de la codicia, por aquello de la austeridad franciscana, ha dejado a miles en la zozobra, no puedo imaginar el dolor de los padres que tienen a un hijo en alguna clínica de IMSS internado en el hospital, cuando se dan cuenta que no pueden ser surtidas las medicinas para la recuperación. El desabasto de medicamentos es vergonzoso, la impericia e impertinencia de no tener un plan para evitar esta catástrofe de salud, provoca que 22 millones de recetas no se surtan, a pesar de que el presidente López Obrador diga lo contrario, se compraron según él 48 mil millones de pesos en medicamentos, que abastecerá este año y el siguiente, si así fuera, el sector salud no pagaría millonadas en subrogación. Dinamarca está lejos, y más alcanzarlos en sus servicios de salud.

No sé si sea necedad o desatino, lo que si se reconoce es la tenacidad con que el AMLO defiende al ejército mexicano. Si la Guardia Nacional era administrada por el ejército, hasta antes de la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación hace algunos días, él debe acatar como demócrata la resolución de regresar el mando a la secretaria de Seguridad, sin embargo, algo ha quedado en el limbo, y es el vivir con un sistema de justicia, obsoleto, corrupto, al servicio de intereses políticos. Once personajes en toga, los magistrados, votan las leyes, ¡porque es la ley! De acuerdo, pero no se escucha ni una sola propuesta para combatir al crimen, los policías no cuentan con protección, a los corruptos se les separa del cargo, no se les juzga, la antigua policía federal hoy Guardia Nacional se convirtió en una cueva de traidores. Si de algo les sirvió de los militares, pudo ser que es aún la institución del Estado más respetada y algo de moral se les habrá pegado. El presidente fue derrotado jurídicamente, no así los intereses del pueblo. usted juzgue.

Nada será igual, lo dijimos alguna vez, hoy con el agua solo en las plantas de los pies, nuestros gobernantes hicieron caso omiso a las advertencias de sequía en el estado, la capital quedará sin recursos hídricos del subsuelo, la sobre explotación tendrá consecuencias graves, el edil escucha lo que quiere mas no lo que es. Con el 95% de los municipios en sequia el Gobernador del Estado pretende acallar la crisis sin un plan, que verdaderamente satisfaga las necesidades básicas de la gente; creemos ni se conoce.

Paciencia ante la impertinencia, acción ante la abulia.

Nos saludamos pronto

OSCAR ESQUIVEL