La Política Y El Agua

Toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible.

 El derecho fundamental del agua en México, consagrado en la constitución de nuestro país en el artículo cuarto de nuestra Carta Magna, nos hace suponer que un recurso tan importante para la vida debe mantenerse al margen de las especulaciones políticas y mucho menos convertirse en rehén de intereses de grupos públicos o privados.

Sin embargo no ocurre así.precisamente por la naturaleza y la importancia del vital líquido, desde el inicio de la civilización en la tierra, el agua y por el agua se han generado guerras y los más acendrados enfrentamientos entre los seres humanos y hasta entre los animales.

Hoy llama la atención en San Luis Potosí, el tema del agua que se ha convertido en un tema urgente, un tema que se pide no se politice en declaraciones recientes del alcalde capitalino Enrique Galindo, pero ¿cuando no? 

Quien tenga memoria y aunque la misma sea prestada, no ha habido ocasiones en que el tema del agua no haya sido visto siempre como un botín en los discursos de campaña, en el debate, en la crítica y tal vez amigo lector hoy estemos viviendo uno de los peores momentos que refieren a la disponibilidad del suministro en San Luis Potosí, así como en muchos otros estados de la República Mexicana. 

Y sabemos que el año entrante, que será un año electoral, muchos de los mensajes y discursos de candidatos y candidatas, será como siempre el tema

del agua, un recurso más escaso cada vez, más difícil de extraer, y si cada vez más un  tema de discusión y de inconformidad social.

La potestad del agua, no pertenece a nadie y es de todos, pero su distribución y saneamiento son responsabilidad de los gobiernos en cada caso distinto pero relevante al tiempo de entender que sin agua simplemente no se puede vivir.

Los problemas que hoy nos aquejan por programas que simplemente no han funcionado nada, para lograr que la ciudadanía sea más consciente en su cuidado y ahorro, en el pago del suministro a fin de garantizar el mantenimiento de las redes de distribución y hasta los proyectos de extraerla a distancia como es nuestro caso como hablamos de la presa El Realito, nos han dejado más desazones que satisfacción por la serie de fracasos y fallas que parecen ya el cuento de nunca acabar. 

Y por lo tanto aquellos que pretendan actuar como albaceas del agua, están condenados al fracaso político. Porque escapa ya cualquier tipo de control político porque su cuidado escapó de nuestras manos desde hace muchos años y hoy en día estamos en el

Umbral de no tener nada que administrar.

Y es cierto que el tema del agua dejo de ser un tema económico para el mejoramiento de su distribución, es ahora un problema social, de personas, 

de usted y yo amigo lector. Un tema que ya no es de las clases del poder político, ni del sector privado. Es un tema de la más pura naturaleza social que solo encontrará remanso y soluciones en la forma en que mejoremos y seamos conscientes en su uso. Hasta el día que no salga definitivamente de nuestras llaves. 

Hasta la Próxima.