Ahora que se han empezado a mencionar nombres relacionados con las posibles candidaturas de los diversos partidos a la alcaldía capitalina también ha saltado la duda respecto de si alguno o algunos institutos políticos podrían dar la pelea a quien eventualmente postule el PVEM dado el desprestigio y postración en que se encuentran las otrora poderosas fuerzas políticas locales como PRI y PAN ya vistos como organismos desvencijados y sin la estructura necesaria para actuar como soportes firmes de un candidato que surja de sus filas o que arropen los dos.
Como ya se maneja en el medio político difícilmente ambos partidos formarían un bloque competitivo contra el verde ya con una estructura bien armada y una sólida organización de su militancia de tal suerte que lo puede llevar a ser el nuevo partido invencible en SLP además de ser el partido en el poder del estado cuyo jefe real, ya se sabe, no gusta de arriesgarse a sufrir derrotas apoyado en la enorme clientela electoral que ha venido acumulando desde su paso por la alcaldía soledense merced a sus políticas públicas asistenciales.
Ciertamente, está a la vista que la única carta local capaz de ofrecer pelea por la alcaldía es el actual alcalde Enrique Galindo Ceballos si es que logra conjuntar a
varios partidos en una amplia coalición que lo postulen y respalden toda vez que lo avala el sobresaliente desempeño que ha tenido en el cargo en el que ha echado a andar importantes programas de obras que vendrán a revolucionar la vida de los potosinos como el de vialidades potosinas que aunque lo realiza conjuntamente con el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, comparte su autoría y ejecución.
De ahí en más no se ve por dónde tanto el tricolor como el blanquiazul puedan sacarse de la manga a alguien con para lanzarlo como candidato con posibilidades de dar la pelea y menos porque la principal preocupación de sus directivos es la de quedarse con alguna de las migajas que pueden dejar para los siguientes procesos electorales principalmente las plurinominales.
CABOS SUELTOS
Sorprendió a mucho que el gobernador Ricardo Gallardo Cardona no haya incluido al titular de la SCT estatal Leonel Serrato en los nuevos cambios de funcionarios que dio a conocer y más porque el también fedatario no ha podido resolver los conflictos de los taxistas que no se cansan de pedir su destitución por solapar, según dicen a los “piratas” pero debe haberle rezado a un santo milagroso porque es de los que estaban en la mira del gallardismo que tanto reprochó en el pasado.
