Sábado 4 de Mayo de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

Economías disruptivas

David Medrano | 02/03/2023 | 23:08

¿Porqué a pesar que se vive un momento económico como pocos, en SLP, se genera una sensación de que aún falta algo? 

 

Aún falta una ruta. Se tiene que entender la economía estatal y su expansión, desde un paradigma diferente. 

 

Ya no es más, la potente -lo es todavía- industria manufacturera, ahora debe ser una economía disruptiva. 

 

Eso comienza por entender el desenvolvimiento de la industria en los últimos años. En el 2007 cuando se generó una crisis económica que también puso en jaque a la automotriz, el principal referente hoy en SLP, el asalto económico fue muy sorpresivo.

 

Para 2009, el siguiente momento de coyuntura, aún con un paradigma de manufactura, representó para la entidad y su Zona Industrial, una transformación que empezó a consolidarse varios años después, la llegada de la armadora de General Motors, y cuando menos, una 20 de empresas más, supuso un cambio gigantesco, se detonó la diversificación de la industria, y empezaron a generarse las primeras cadenas de valor, con otras unidades productivas, en las tier 2 y 3, servicios y productos.

 

Muchas de las empresas de pailería, soldadura, mantenimiento, limpieza industrial, u otras, se fortalecieron o fueron creadas, con la instalación de la armadora GM, y su red de proveeduría tier 1. El mismo efecto se observó en la industria logística, el transporte de carga y de personal, ahora en una alerta amarilla, puede decirse, por los problemas no resueltos todavía en movilidad.

 

Diez años después, en un parque industrial potosino iniciaba operaciones la segunda armadora, la de la firma alemana BMW, y que supuso otra coyuntura, el paradigma de la manufactura para entonces, había logrado superarse y ahora es el del fortalecimiento de los servicios, la rapidez en la distribución, con el just in time que eventualmente, se convertirá en uno nuevo, potencializado por el nearshoring.

 

Con una nueva expansión de la industria, más empresas de primer nivel y alta gama, el fortalecimiento de la proveeduría, se llegó al 2023, a la siguiente coyuntura, en la que los procesos de producción se vuelven más especializados y demandantes, por ejemplo, el uso de energía limpia para la fabricación.

 

Ni qué decir del empleo eventual de la Inteligencia Artificial. Quizá la siguiente coyuntura.

 

Ahí se inscribe el nuevo paradigma de la economía estatal, en el que se vuelve forzosa una ruta clara, en la que se debe considerar que hay un mercado posicionado, caso de la industria automotriz, pero en el que sus necesidades o segmentos, requieren de una mayor incorporación de tecnología, también modelos de organización más novedosos.

El paradigma de la sustentabilidad (producción, redes de proveeduría, servicios, infraestructura, mucha tecnología), le dará la posibilidad a SLP, para convertirse en la nueva potencia económica del país. Pero aún falta esa ruta (AU).