Lunes 6 de Mayo de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

El necesario convoy de vigilancia

Miguel Ángel Guerrero | 27/12/2022 | 00:10

Aunque a quienes no han sufrido los embates de la delincuencia y de los pandilleros no guste el regreso del convoy de vigilancia que tan buenos resultados dio en tiempos del profesor Carlos Jonguitud Barrios es más la gente que ve  la medida como una buena alternativa tanto para inhibir el delito como para frenar los desmanes de las más de 300 pandillas que hay en la ciudad.

              

De acuerdo a lo informado por el secretario de seguridad pública del estado el general Guzmar González de nueva cuenta se pondrá en marcha dicha estrategia de vigilancia en la ciudad consistente en disponer de varios vehículos y patrullas en convoy para realizar constantes recorridos por las zonas más conflictivas por el pandillerismo y las colonias susceptibles de padecer a delincuentes que busquen cometer robos a casas, de la misma manera en que se implementó y aplicó durante el gobierno jonguitudista con aquel famoso tamaulipeco titular de seguridad Waldemar Rodríguez Inurrigarro al frente en el entendido de que no cometerá los errores de entonces cuando detenían a cualquier joven que encontraran en la calle y dependiendo de su facha lo cateaban y en ocasiones los rapaban y llevaban a las celdas de la corporación de donde eran liberados luego de que sus padres pagaran una multa económica.

                  

Esas detenciones provocaron las quejas de los críticos de siempre por considerarlas violatorias de los derechos humanos además de que con el convoy se logró erradicar de la zona de Fundadores, Obregón y jardín de San Juan de Dios a los homosexuales que habían hecho de esos rumbos su centro de operaciones como sexoservidores

                    

Como saldo de las operaciones del llamado entonces “convoy de sobrevigilancia” disminuyó la violencia pandilleril en colonias periféricas y especialmente del sur de la ciudad, además de que también los jóvenes se cuidaron de andar fuera de sus casas a altas horas de la noche por temor a ser detenidos lo que igualmente pasó en zonas residenciales donde se detenía y checaba a quienes se mostraran sospechosos con lo que se pudo evitar que crecieran los robos a casa – habitación que es lo que se pretende hacer con el nuevo convoy que se pondrá en marcha.

                    

Desde luego, es de esperarse que los agentes policiacos cometan abusos en esta tarea pero ya será cuestión de las medidas que tome el general Guzmar para evitarlas y no dar lugar a que las buenas conciencias pongan el grito en el cielo como ocurrió en la primera etapa del convoy allá por la década de los ochentas.

                      

CABOS SUELTOS

                        

Por el disparo de los contagios del covid era inevitable que se estableciera como obligatorio el uso del cubrebocas especialmente en espacios cerrados, lo que todo mundo debe atender si no queremos dar lugar a medidas más extremas como el confinamiento pero, por lo pronto, bastante acertada la decisión del secretario de salud Daniel Acosta Díaz de León pues no quedaba otra luego de que se registraban más de cien contagios diarios.