Las autoridades españolas buscan a una persona que cruzó en parapente la valla que divide a Marruecos y el enclave español de Melilla, en lo que parece ser una nueva y creativa forma de ingresar sin autorización al territorio europeo.
Dos ciudadanos denunciaron la presencia del parapente el jueves por la tarde, dijo la delegación del Gobierno español en Melilla.
La persona aterrizó y huyó, por lo que las autoridades sospechan que se trata de un migrante.
Se desconocía la identidad de la persona, pero las imágenes del suceso circularon en redes sociales.
Los pequeños enclaves de Ceuta y Melilla son las dos únicas fronteras de la Unión Europea con el continente africano.
Las vallas de hierro de varios metros de alto, con alambrado de púas, y equipadas con cámaras de video y torres de vigilancia, son escenario de intentos de cruces, en ocasiones mortales.
La frontera con Melilla ha estado en el centro de un escándalo desde junio, cuando 23 personas murieron en el intento de cientos de migrantes de forzar su ingreso.
La Policía marroquí lanzó gases lacrimógenos y golpeó a algunos hombres con sus bastones, incluso a algunos que estaban tendidos en el suelo.
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