En el marco de la emergencia decretada ante el aumento de las extorsiones, Honduras envió ayer a más de 600 policías militares a las zonas fronterizas para combatir a pandilleros.
Los miembros de la Policía Militar de Orden Público, creada en el gobierno anterior con efectivos escogidos en batallones para cumplir funciones policiales, salieron de la capital rumbo a las fronteras con El Salvador, Guatemala y Nicaragua.
"En cumplimiento de la orden emanada por la presidenta de la República y en el marco del Plan Integral de Seguridad, el domingo más de 600 policías militares del orden público han salido a reforzar los operativos de seguridad en los puntos fronterizos", informó el portavoz de la PMOP, Mario Rivera.
Explicó que los refuerzos apuntan a "evitar el ingreso de miembros de estructuras criminales" procedentes de los países vecinos, sobre todo de El Salvador.