Para que la cuña apriete

Justicia a los asesinados, protección a los amenazados, garantías a todos los periodistas. No es politiquería, que cesen señalamientos y descalificaciones desde el poder y desde donde sea, respeto a la libertad de expresión y tolerancia a la crítica.

APENAS ESTÁ EL AGUA P’AL PUERCO y para que la cuña apriete, ha de ser del mismo palo, son dichos populares que pueden ser aplicados ante el anuncio de Alejandro Rojas Díaz-Durán, de que iniciará el programa, el Miércoles del León, para contrarrestar el Martes del Jaguar, de Layda Sansores. Ambos personajes se distinguen por ser boquiflojos y buenos para el golpeteo verbal. Lo que digan en sus programas va a causar escándalo, aunque no pase de eso y todo quede en las guerritas de lodo que se traen los aspirantes a la candidatura del MORENA. En los descobijes, reales o inventados, los únicos que van a salir perjudicados son el jaguar y el león, porque los andan metiendo en argüendes en los que ellos nada tienen que ver.   

UN RECONOCIMIENTO al Congreso del Estado, por preservar las tradiciones montando un Altar de Muertos, con los elementos característicos de esa celebración. Por primera ocasión, y eso se les agradece, el Altar de Muertos, fue dedicado a los periodistas potosinos que se nos han adelantado pero nos han dejado un gran legado, por la trascendencia testimonial de su trabajo, para la historia, y por su ejemplo de entrega y vocación a las tareas informativas. Muchos son los mencionados y si hubo alguna omisión no fue intencionada, pues, días antes, el área de Comunicación Social, preguntó abiertamente a los reporteros de la fuente los nombres de los compañeros fallecidos y con los datos aportados se integró la lista. El 28 de octubre, se instaló, en el patio central del edificio Presidente Juárez, un altar muy emotivo porque están las fotografías de los añorados compañeros y, a manera de adorno u ofrenda, herramientas de trabajo de otros tiempos, empezando por la clásica libreta y el lapicero, así como la máquina de escribir mecánica. De los que están en el Altar, hubo comentarios entre los compañeros presentes y salieron a relucir algunas anécdotas y características de su personalidad. Algunos recordamos que precisamente ese día, 28 de octubre, se cumplió un año del fallecimiento de Marco Antonio Hernández Morales, Marquitos. Como buen huasteco, aquí ha de andar, departiendo con todos y disfrutando de la ofrenda, pensamos.

LA DIPUTADA Bernarda Reyes, habló de la importancia y significados de la tradición. La diputada Emma Idalia Saldaña, los nombró: “Marquitos, Margarita, Pascual, Esteban, Eduardo López Cruz 'Calek', Eugenio, Hugo, Cletita, Don Pepe, Enrique, Chacualito, Rodolfo Felipe, Daniel, Rocío, Quetita, Llanitas, Toño, Lucía, Miguel, Carlitos, don Florencio, Juan, Fernando, Roque, Luis Manuel, Ascención, Aureo, Jesús, David, Alex, Avalos, Cataño, Toño García, Carlos, Ricardo; ya los esperamos para que vuelvan por unos segundos, minutos, o el tiempo que les permitan desde el cielo, para bajar y recoger su pluma, sus libretas para sus apuntes, su cámara de fotografía y de video, retomar una máquina de escribir y, por qué no, recorrer todos esos viejos espacios que fueron fieles testigos de su entrega y dedicación a su profesión”. “Es la fecha precisa para volver a retomar los recuerdos, vivencias y anécdotas que aún son parte de la historia que escribieron en nuestro San Luis Potosí”, agregó. Pepe Alemán, a nombre del gremio periodístico, agradeció al Congreso haber dedicado su Altar de Muertos a los periodistas y exhortó a quienes son el relevo generacional a honrar la memoria de quienes ya se fueron haciendo un buen periodismo. Olivia Cerrillo López, condujo el programa y en una de sus intervenciones expresó: “Aquí estoy para vivir, mientras el alma me suene, y aquí estoy para morir, cuando la hora me llegue. En los veneros del pueblo, desde ahora y desde siempre; varios tragos es la vida y un solo trago, es la muerte”. 

AL INICIO DE LA CEREMONIA, Dolores Eliza García, Lidia Nallely Vargas, Emma Saldaña, Claudia Tristán, Bernarda Reyes y Cuauhtli Badillo, a nombre de la legislatura, recibieron a los invitados y los condujeron por un camino de hojas de cempasúchil. Después de las intervenciones, se recorrió la exposición fotográfica, Vive la Muerte, de Juan José Gómez. Para terminar, podemos decir que se levantó la ofrenda, pues hubo zacahuil, gorditas, tamales y otros antojitos. Los equipos, de Comunicación Social, encabezado por Yoali Andrade; y de Servicios Internos, a cargo de América Loera, se lucieron con la organización y montaje. En Vallejo 200, se puede visitar el Altar de Muertos y la exposición Vive la Muerte. Buen detalle, hacer sentir a los vivos, la presencia de quienes ya murieron, pero dejaron huella e hicieron escuela. Como dijo, Pepe Alemán, son ejemplo a seguir y motivación para quienes ejercen la tarea informativa, aunque no sea fácil, entrañe riesgos y no sea bien remunerada. Para muchos, el periodismo es la vida, aunque al final de cada jornada termine uno muerto, a veces de cansancio, a veces literalmente. NOSOTROS DECIMOS: 

Se aplaude que recordaron

Su fructífera existencia,

Como ellos ya la libraron,

¡Sigamos con la penitencia!

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