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Fugas de metano: ¿cómo contribuyen al cambio climático?

Agencia Reforma | 27/09/2022 | 17:21

Un secreto a voces de la industria del gas y del petróleo son las fugas de metano (CH4), que alimentan la crisis climática, apunta el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
 
 Es el componente principal del gas natural. Se emite durante las operaciones de perforación, producción y transporte de ambos combustibles fósiles.
 
 A menudo se debe a imperfecciones en los equipos, pero a veces también es liberado de manera intencional en las instalaciones de gas y petróleo por razones de seguridad.
 
 El metano es un gas de efecto invernadero sin color ni olor. Cada una de sus moléculas atrapa más calor en la atmósfera que aquellas del dióxido de carbono (CO2).
 
 Por lo tanto, su potencial para calentar el planeta es 80 veces más elevado que el del CO2 durante los 20 años posteriores a su liberación, detalla el organismo de la ONU.
 
 De hecho, es responsable de más de un cuarto del calentamiento que experimenta el mundo en la actualidad, según datos recopilados por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
 
 Project Drawdown, organización que recopila soluciones al cambio climático, sostiene que las emisiones de metano por fugas pueden reducirse a través de acciones como detectar y reparar fugas en tuberías, válvulas, compresores y otros componentes. Otra idea es mejorar el equipo de control y los materiales de los ductos.
 
 La Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) agrega que se podría prohibir el quemado en antorcha, una forma de deshacerse del gas residual utilizada en instalaciones de la industria de los combustibles fósiles. Sólo estaría permitido hacerlo en situaciones de emergencia.
 
 Si el mundo quiere alcanzar el objetivo más ambicioso del Acuerdo de París, es decir, limitar el calentamiento de la Tierra a 1.5 grados centígrados durante este siglo, es necesario que las emisiones de metano se reduzcan de 40 a 45 por ciento para 2030, subraya el PNUMA.
 
 México es uno de los más de 100 países que se unieron al Compromiso Global del Metano, un esfuerzo colectivo para disminuir 30 por ciento las emisiones de dicho gas para 2030.