Feministas del colectivo Mexiro AC rechazaron en la "Glorieta de las Mujeres que Luchan", conocida antiguamente como Glorieta de Colón, la estrategia militar del Presidente Andrés Manuel López Obrador para enfrentar la seguridad pública.
"El Estado militarizado es un crimen de Estado", acusaron.
En la Glorieta de Paseo de la Reforma, que las activistas han dedicado a las mujeres que exigen justicia por sus hijas asesinadas en México, las feministas pintaron con tinta blanca los nombres de mujeres y hombres que han sido asesinados o desaparecidos presuntamente por militares y un mensaje más grande de "Fuera el Ejército".
"Los más los más de 16 años de una estrategia militarista fallida, injusta y dolorosa han demostrado distintas violaciones a los Derechos Humanos", dijo Mexiro en un comunicado leído en el lugar.
"Las estrategias de enfrentamiento producen más muertes y graves violaciones a los Derechos Humanos contra civiles. En el 2020, según datos oficiales, se registraron 237 civiles asesinados por disparo de arma de fuego cometidos por agentes en servicio de la Secretaría de la Defensa".
Las mujeres acusaron al Gobierno Federal de que, en lugar de convocar a un diálogo para crear una estrategia de seguridad nacional, ha retomado la estrategia militar de seguridad pública iniciada en 2006 por Felipe Calderón.
Ayer, en el desfile por el inicio de la Guerra de Independencia, el Presidente López Obrador, quien había prometido terminar con la estrategia militar de Calderón, celebró el traspaso de la Guarida Nacional a los militares.
"Una sociedad militarizada atenta contra nuestros procesos democráticos. En un País de muerte, nosotras sembramos rebeldía y caminos de paz. El Estado militarizado es un crimen de Estado", denunció el colectivo en su comunicado dirigido al Presidente López Obrador y a todos los partidos políticos.
En la intervención de este día, las activistas denunciaron casos como el de la familia de Nitza Paola Alvarado Espinoza, José Ángel Alvarado Herrera y Rocío Irene Alvarado Reyes, quienes en diciembre de 2009 fueron detenidos arbitrariamente por militares en Chihuahua y siguen desaparecidos, y su caso fue atraído por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La señora Reyna Flores Romero, del Estado de México, denunció también la desaparición de su hijo Horacio Cruz Flores, un militar.
Según su relato, su hijo de entonces 23 años se encontraba en la 25 Zona Militar de Puebla y desapareció junto con un compañero y que la información se la dio el teniente César Malpica Maltés del Batallón en la 17 Compañía de Mantenimiento.
"He buscado a mi hijo y no lo hallo, ni vivo ni muerto, ¿Cómo va a desaparecer de un campo militar?", indicaba en una cartulina que cargaba con la hoja de búsqueda de su hijo.
"Ese mismo día que fue perdido mi hijo, también se perdió un compañero de ahí mismo de la 25 zona. Su familia no sabe ni qué pasó con él tampoco. Queremos justicia, todas mis compañeras, justicia, justicia", gritó durante la intervención de la Glorieta.
"Ayer, 16 de septiembre, en las calles de la Ciudad de México transitó el Ejército en su desfile. Hoy mujeres organizadas y luchadoras salimos a tomar las calles y hacer nuestro posicionamiento público contra la guerra y el terror", apuntó Mexiro en su cuenta de Twitter.