Miércoles 13 de Noviembre de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

HOY LES TOCA

Lupillo González | 17/08/2022 | 09:08

Durante muchos años, una parte de la población de nuestro país se mantuvo inconforme y fue sumamente critica con los gobiernos en turno, muchos de ellos con ideas políticas de izquierda y otros tantos que simplemente renegaban por todo. Obviamente también periodistas y ácidos pero geniales moneros. 

 

Con la llegada de Andrés Manuel López Obrador, esa parte de la población se destensó y cambiaron fenomenalmente los roles. Muchos que cuestionaban duramente la represión, el avallasamiento, los fraudes electorales, la corrupción, los abusos, el engaño, el uso perverso de los programas sociales, la compra de votos, las mentiras oficiales y mil cosas más, mutaron de una manera extraordinaria y ahora su proceder es a la inversa.

 

Esos críticos extremistas, hoy no tienen un ápice de autocrítica para el gobierno federal, insisto, no estoy generalizando porque algunos si son responsables, ecuánimes y objetivos. La inmensa mayoría no.

 

Es divertido, ahora ver como ahora justifican de mil formas lo que antes veían tan mal en otros gobiernos, importan personajes del PRIAN a Morena y en ese momento, se transforman en políticos impolutos, honrados, íntegros, rectos, justos, incuestionables e intachables. Aquellos que en su juventud fueron reprimidos por protestar, hoy aplauden el uso de la fuerza y la militarización del país. Que difícil debe ser estar buscando la forma de justificar todo lo hace mal un gobierno, pero es hasta un equilibrio natural y sano que necesitaba nuestra incipiente democracia. El cambio de roles les cayó como anillo al dedo. 

 

Antes era fantástico ver la crítica de los moneros al presidente y esas grandes ocurrencias para dibujar momentos importantes en la vida política del país. Hoy muchos de ellos quedaron reducidos a cenizas, aplaudiendo en lugar de criticar, sus cartones son para replicar lo dicho por López Obrador en sus “mañaneras”. Veo el enorme esfuerzo cotidiano para exculpar al actual gobierno federal y sus principales personajes.  

Los que antes justificaban todo lo negativo, hoy han tomado el rol de aquellos opositores y viceversa. Los inconformes crónicos hoy se ponen el atuendo de nobles corderitos. Equilibrios al fin.