Más de un millar de españoles se querellaron por estafa contra una sociedad que ofrecía invertir en cannabis terapéutico y cuyas actividades habrían causado numerosas víctimas en todo el mundo, indicaron este lunes fuentes concordantes.
Esta denuncia colectiva acusa a la sociedad llamada JuicyFields de estafa, apropiación indebida de fondos y blanqueo de capitales, señaló a la AFP Norberto Martínez, abogado del bufete Martínez-Blanco.
Con cerca de 1.200 denunciantes, la querella fue presentada el fin de semana ante la Audiencia Nacional, una jurisdicción en Madrid a cargo de asuntos complejos, confirmó a la AFP un portavoz de esa corte.
Sería la primera denuncia colectiva contra JuicyFields, una sociedad basada en Países Bajos que ofrecía invertir en plantas de cannabis para uso médico, prometiendo a los inversores un rendimiento muy alto.
El beneficio de la inversión prometido estaba "entre el 29% y el 66%", explica el bufete Martínez-Blanco, en una nota de prensa en la que habla de una posible "estafa piramidal", que consiste en pagar a los participantes existentes con fondos aportados por los nuevos inversores.
De hecho, según varios testimonios recogidos por la AFP, los inversores obtuvieron en un primer momento ganancias sustanciales. Pero a partir del 11 de julio, se fue haciendo imposible recuperar dinero.
"La alarma surgió el pasado día 13 de julio, cuando la página web de JuicyFields dejó de funcionar (...) dejando a los inversores sin poder acceder para solicitar la retirada de sus inversiones", señalaron los abogados.
Para Martínez-Blanco, las causas del "'crash' en el sistema" fueron la reducción en la cantidad de nuevos inversores y la caída de las criptomonedas.
Según las estimaciones del bufete, en España habría unas 4.500 víctimas de JuicyFields, con "pérdidas de media de 6.500 euros (6.660 dólares)", pero en algunos casos podrían ir hasta los 200.000 euros (casi 205.000 dólares)
Muchas otras víctimas de Juicyfields se encontrarían en varios países de Europa.
En Francia, una mujer ya presentó una denuncia en solitario contra la empresa, y se espera que se interponga una denuncia colectiva antes de fin de año, según un abogado contactado por centenares de presuntas víctimas, Arnaud Delomel.
"Comencé invirtiendo una pequeña suma porque quería probar primero, para ver si tenía un retorno de la inversión", así que "compré una planta a 50 euros y después de tres meses y medio me dio 25 euros de beneficio", relató la mujer de 58 años que introdujo la denuncia.
Esto "me dio confianza, así que inmediatamente reinvertí el dinero y aporté cantidades mayores", agregó esta persona, quien dijo haber perdido en total 3.600 euros (3.690 dólares).
La AFP no ha podido contactar con la sociedad.