Clara Villarreal | 31/05/2022 | 10:41
Una conversación para reflexionar.
Entre mas vamos creciendo nos vamos preguntando y valorando el gran esfuerzo que nuestros padres hicieron para darnos sustento, educación y valores. La semana pasada estuve en una reunión con unos amigos donde platicamos sobre lo difícil que se ha vuelto salir adelante y no solo nos referimos a lo económico si no también a los valores y al acceso a la educación.
Nuestros padres a nuestra edad ya iban mucho mas avanzados en varios aspectos que garantizaban la estabilidad familiar, inclusive muchos de ellos en la actualidad están jubilados de por vida; algo que a nuestra generación no nos tocará experimentar.
En especial, me llamó la atención que algunos amigos coincidieron en que han pasado por momentos de estrés y ansiedad ya que las oportunidades; cada día, se han vuelto mas competitivas y esto los ha llevado a hacer esfuerzos sobrehumanos para garantizar las necesidades básicas para la educación y el sustento de sus hijos. De estas conversaciones nos pusimos a reflexionar sobre el apoyo que muchos de nosotros seguimos recibiendo de nuestros padres a lo cual le llamamos “el empujoncito”, donde gracias a que siguen pendientes de nosotros, hemos podido salir adelante y así hacernos de un patrimonio, sin embargo también reconocimos que sin dicho empujoncito nos sería mucho más difícil sobresalir.
Tuve esta conversación durante algunos días dentro de mi cabeza, donde reflexionaba sobre aquellas personas que no cuentan con ese apoyo familiar, esto los lleva a buscar ayuda en diferentes instituciones financieras donde los intereses no les son nada favorables y de ahí muchos de ellos llegan a tener mas de un trabajo para poder solventar los gastos familiares.
Sea cual sea tu historia hay que reconocer que algunas personas tienen la fortuna de el “empujoncito” y por esto mismo ahora me surgen las siguientes preguntas:
¿Qué está pasando con nuestra economía?
¿Cómo se consiguen buenas oportunidades para crear un patrimonio?
¿Qué educación financiera les estamos dejando a nuestros hijos?
¿Qué patrimonio podremos heredarles a nuestros hijos?
¿Qué valores estamos perdiendo como sociedad en esta nueva era?
¿Qué calidad de vida tendremos en nuestra vejez?
y la pregunta final...
¿Podremos nosotros darle un “empujoncito” a nuestras futuras generaciones?
Twitter: @claravillarreal