Dos empresas se perfilan como las nuevas controladoras de la distribución de medicamentos y material de curación del sector público, a tres años de que la actual Administración desmanteló el modelo por el que la compra y el reparto eran ofrecidos por el mismo proveedor.
Grupo Traxion y Medica Farma Arcar ganaron dos de los seis contratos licitados por el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) para la distribución de medicamentos y material de curación en lo que resta de 2022.
El pasado 13 de mayo, las mismas empresas habían ganado 11 contratos por casi mil 400 millones de pesos para proveer el mismo servicio al Instituto Mexicano del Seguro Social, también en lo que queda de este año.
Los dos contratos del Insabi cubren 11 estados del País. Traxion y Arcar prácticamente no tuvieron competencia, pues la otra empresa que cotizó, no probó contar con recursos para el servicio.
Para las otras cuatro regiones, que incluyen a la Ciudad de México, la licitación se declaró desierta, pese a que Traxion cotizó para las seis regiones, Arcar para cuatro, y cumplían todos los requisitos técnicos.
El contrato con Traxion es hasta por 71 millones de pesos, para reparto de hasta 44 millones de piezas de medicamentos y 12 mil 700 toneladas de material en cinco entidades, incluidas Jalisco y el Estado de México.
Arcar, en tanto, cotizó hasta 36 millones de pesos para 25 millones de piezas y 7 mil 500 toneladas de material en Veracruz y cinco estados del sureste, que deben ser entregados en hospitales, farmacias y almacenes que eran operados por gobiernos estatales, antes del traspaso de funciones de salud al Gobierno federal en 2019.
Sin embargo, la licitación del Insabi se quedó a medias, problema recurrente en los concursos para compras consolidadas de dicho órgano.
A finales de 2021, la licitación consolidada de medicamentos de todo el sector salud realizada por el Insabi resultó en 265 de 583 claves desiertas, mientras que sólo 129 de 411 claves de material de curación se pudieron adjudicar.
Actualmente, el órgano, creado en este sexenio, desahoga otras cuatro licitaciones para comprar 174 claves de medicamentos, y dos más para 389 claves de material.
Desde 2020, el Gobierno federal planteó que buscaría convertir a la paraestatal Laboratorios y Reactivos de México (Birmex) en la gran distribuidora de medicamentos del sector público, luego de que eliminó el modelo de contratación integral que por décadas controlaron grandes distribuidoras.
Pero este proyecto no se ha concretado, por lo que cada dependencia sigue haciendo compras de medicamentos, algunas de ellas masivas, y contratando distribución por su cuenta.
En abril, por ejemplo, Pemex asigno a Farmacéuticos Mayo, el contrato hasta por 274 millones de pesos para distribuir medicamentos en las farmacias de su sistema de salud hasta el cierre de 2024.
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